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Una Bariloche violenta y fatal

Manifestaciones de protesta por el caso de un joven de 15 años muerto de un balazo policial en la nuca produjeron dos nuevas víctimas, una docena de heridos por perdigones de gomas, destrozos y saqueos.

La ciudad de San Carlos de Bariloche se vio envuelta en una inédita espiral de violencia y enfrentamientos entre manifestantes contra fuerzas policiales, que ya sumó tres jóvenes muertos y una veintena de personas heridas por perdigones de goma. Todo comenzó con un supuesto caso de gatillo fácil registrado el jueves pasado, que tuvo como víctima a un pibe de 15 años, en el barrio Boris Furman, de los humildes altos de la ciudad. Las manifestaciones contra el asesinato produjeron ayer serias refriegas que culminaron con distintos hechos violentos. En tanto, el gobierno de Río Negro ordenó separar a cuatro efectivos y al comisario de la seccional implicada, y dispuso el “traslado inmediato” de todo el personal que cumplía funciones durante los incidentes.

Tres personas muertas y varias heridas fue lo que dejaron los incidentes en la ciudad de Bariloche, durante la protesta que encabezaron familiares y amigos de un joven de 15 años víctima de un presunto caso de “gatillo fácil”.

Ante la gravedad de los hechos, el gobernador de Río Negro, Miguel Saiz, ordenó pasar a disponibilidad al comisario Jorge Carrizo mientras que otros cuatro efectivos fueron separados de sus funciones por su vinculación con la represión de la protesta.

Por otra parte, se instruyó a la secretaria de Derechos Humanos, Gladys Cofré, para que se traslade a San Carlos de Bariloche a fin de tomar contacto con representantes de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH), autoridades sociales, vecinos y familiares.

En tanto, grupos de manifestantes protagonizaron ayer nuevos incidentes con la Policía en el Centro Cívico de Bariloche, rompieron vidrieras y saquearon negocios en la zona céntrica cuando eran dispersados, según denunciaron los propios comerciantes.

Los principales locales afectados están situados sobre la calle Mitre, entre ellos una farmacia y varias tiendas de ropa.

La reacción policial generó corridas y, como represalia, un amplio grupo de vecinos cortó la ruta nacional 40, en el tramo que va de desde Bariloche hasta El Bolsón.  Voceros policiales indicaron que hubo alrededor de una docena de detenidos.

El enojo de los vecinos del alto de Bariloche, la zona de los barrios más humildes de la ciudad, surgió luego del crimen de Diego Bonefoi, de 15 años, quien fue asesinado de un disparo en la nuca por parte de un policía, en un hecho aún no aclarado pero con indicios de tratarse de un caso de “gatillo fácil”.

Los vecinos habían apedreado anteayer la comisaría 28, donde trabajaba el policía que mató al joven, y agredieron al intendente local, Marcelo Cascón, al que le rompieron parte del automóvil.

El primero de los vecinos que murió tras los incidentes fue un joven que 28 años, identificado como Sergio Cárdenas, quien recibió varios disparos, en un episodio que dejó además 14 heridos.

En tanto, ayer se informó sobre la muerte de otro joven, Matías Carrasco, de 17 años, quien había ingresado el jueves al hospital con una herida en la zona toráxico abdominal de gravedad y luego de ser operado falleció cerca de la medianoche.

El juez Martín Lozada, quien está a cargo de la investigación, intentó durante toda la jornada dialogar con los jóvenes para que desistieran de sus ataques, pero tampoco logró convencerlos. Por el contrario, cada vez que se acercó hasta los manifestantes recibió fuertes cuestionamientos porque no paraba la represión policial, denunciaban los jóvenes y algunas mujeres.

Sobre el hecho que disparó la pueblada, de acuerdo con lo señalado por el magistrado a un medio local, en medio de una persecución, el policía posteriormente detenido “hizo uso de su arma reglamentaria para disparar el proyectil que impactó en la cabeza del joven de 15 años”.

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