Luego del escándalo por los decretos de conmutación de penas, el gobernador Antonio Bonfatti le pidió la renuncia a la secretaria de Asuntos Penales de la provincia, Débora Cotichini. El mandatario lanzó reproches a la Justicia y anunció que firmará un decreto de autolimitación para casos similares.
El caso que derivó en la salida de Cotichini estremeció la semana pasada a Santa Fe. El propio Bonfatti debió admitir que se había enterado por los medios. Dos decretos (uno de octubre de 2014 y el otro del 5 de agosto de este año) fueron los disparadores del escándalo. A través de esos decretos, el gobernador y su ministro de Justicia, Juan Lewis, conmutaron las penas de decenas de reclusos.
El escándalo se desató cuando la prensa reveló que entre los beneficiados se encontraban dos de los tres reclusos condenados por un doble homicidio ocurrido en 2007 en San José del Rincón, cuando tres asaltantes mataron al comerciante Rubén Mattioli, de 53 años, y a su hijo de 19. La familia de Mattioli interpretó la decisión del gobierno como “un golpe bajo”.
El ministro Lewis se reunió la semana pasada con dos de las hijas de Mattioli para pedirles disculpas. “Fue un error; no evaluamos la repercusión social”, había admitido Lewis. El gobernador anuló el segundo decreto pero el primero, firmado en 2014, quedó firme. El rechazo de los santafesinos a la medida generó cortocircuitos en el Frente Progresista y desde el radicalismo salieron a pedir la renuncia de Lewis.
Ayer a la tarde, en reunión de gabinete, Bonfatti resolvió desplazar de su cargo a Débora Cotichini y ratificó al ministro de Justicia. Por la mañana, la funcionaria saliente recibió a los familiares de Mattioli. Sus explicaciones no resultaron convincentes.
Cotichini –igual que Lewis y Bonfatti– les dijo a las hijas del comerciante asesinado que ella también se enteró “por la prensa” de que entre los beneficiados por la conmutación de penas estaban dos de los tres condenados por el crimen.
Después de la reunión con la ahora ex funcionaria, Alicia Mattioli hizo fuertes críticas al gobierno provincial: “Fue lo de siempre. Escuchar hablar a Cotichini nos indigna. Le reclamamos por qué Lewis no nos dijo la verdad cuando estuvimos en su despacho el miércoles pasado y ella nos jura que no sabían y que se enteraron por la prensa. ¡Tan inoperante se puede ser!”, se quejó la hija de Rubén Mattioli.
Unas horas después, en la reunión de gabinete, Bonfatti le pidió la renuncia a la secretaria de Asuntos Penales por considerar que no tomó los recaudos necesarios y avisó que firmará un decreto de autolimitación para casos de conmutaciones de penas a condenados por homicidio, similar al decreto vigente que excluye de ese beneficio a las personas condenadas por violación.
Además de desplazar a Cotichini, el gobernador lanzó críticas a la Justicia: “Quiero pedir que la Justicia fije las penas. Por la Constitución de Santa Fe el gobernador está facultado, pero la verdad es que es una función que en alguna medida me excede porque hay una evaluación del Servicio Penitenciario, después del juez de Sentencia, después por parte de la Corte Suprema de Justicia. En definitiva, que sean los jueces los que fijen las penas”.
El gobernador hizo un llamado para que “la Policía recupere el respeto de los santafesinos”
En medio de cuestionamientos que atraviesan a la Policía provincial, el gobernador Antonio Bonfatti encabezó ayer en Cayastá el acto por el 151º aniversario de la institución y lanzó un llamado para que “la Policía recupere el respeto de los santafesinos”.
Junto con el ministro de Seguridad Raúl Lamberto, Bonfatti dirigió un discurso a la plana mayor de la fuerza: “Voy a ejercer hasta el último día de gestión toda la autoridad que me confieren la Constitución y la ley para seguir mejorando el Estado y la Policía de la provincia. Queremos lograr el encuentro entre la sociedad y la fuerza, que sus integrantes recuperen el prestigio pero, fundamentalmente, que recuperen el respeto de los santafesinos”.
El mandatario provincial reafirmó su decisión de reformar la Policía: “Así como nos propusimos reformar el Estado y lo regionalizamos, lo descentralizamos y elaboramos un Plan Estratégico hasta 2030, también nos propusimos transformar a la Policía: una institución que por muchas causas había perdido su autoestima, que en épocas negras del país tuvo que subordinarse a determinadas prácticas que siempre hemos condenado y rechazado”.
El gobernador resaltó la inversión en equipamiento y la mejora de las condiciones laborales: “Cada día veo a más hombres comprometidos con la institución, haciendo prevención del delito o esclareciendo casos. Esto es palpable y se ven las estadísticas, aún cuando sigamos teniendo hechos negativos que nos causan una profunda decepción”.
“Los procesos de transformación requieren de tiempo, porque las culturas no se cambian de un día para el otro. Los invito a no bajar los brazos; nosotros vamos a seguir poniendo nuestro máximo esfuerzo”, concluyó Bonfatti.
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