Una mujer de 57 años fue asesinada por su inquilina en barrio Alvear, según la principal hipótesis de los investigadores. De acuerdo con lo que contaron vecinos a El Ciudadano, las mujeres tuvieron un fuerte entredicho; incluso la víctima llegó a avisar a la Policía lo que estaba pasando, pero antes de que llegaran los uniformados la agresora la apuñaló casi veinte veces. La herida fue trasladada a un hospital, pero falleció poco después de llegar. La sindicada homicida fue detenida a metros de la escena del crimen. “Fue casi en flagrancia”, explicó a El Ciudadano la fiscal Marisol Fabbro, haciendo referencia a que el hecho pasó instantes antes de que llegaran los policías al lugar y detuvieran a la sospechosa, una mujer con historial en las crónicas policiales.
Ángela Ruiz tenía 57 años. Vivía en la casa de su tía, de Hutchinson al 3700, a quien acompañaba y ayudaba en sus tareas diarias, ya que es una señora mayor. Sus allegados la recuerdan como una persona atenta, que jamás tuvo problemas con nadie.
Según vecinos de barrio Alvear, hace más o menos un mes, Ángela y su tía decidieron alquilarle un cuarto trasero que tienen en su casa a una mujer que no tenía dónde vivir.
Era Claudia R. (de 44 años), a quien no conocían mucho, pero, de acuerdo con un comerciante de la zona, “les dio lástima”. Si bien al principio las cosas entre Ángela y Claudia anduvieron bien, con el correr de los días la relación se puso más tensa.
“Nosotros a la mina nueva no la conocíamos. Por lo que sé venían con problemas; ya se habían peleado un par de veces”, explicó un muchacho de la zona.
Pero al parecer la cosa el viernes a la noche se puso más espesa. Mas o menos a las 21, las mujeres tuvieron un nuevo entre juntar dicho por un tema relacionado con la paga del alquiler; Ángela se asustó por lo que estaba pasando y llamó al 911. Pero, ni bien cortó el teléfono, los problemas siguieron en la puerta de la casa.
En el frente del domicilio, que está dividido de la vereda por un alambrado y dos árboles de nísperos, Claudia le dio 17 puñaladas a su víctima, dijeron vecinos. “Primero le clavó el cuchillo en la cara y cuando la señora se cayó al piso se le tiró arriba y le siguió dando en el pecho”, contó un habitante del barrio.
A los pocos instantes de que Ángela sufriera el ataque, llegó a la escena del hecho un móvil de Comando Radioeléctrico. Primero, los uniformados se ocuparon de que la mujer apuñalada fuese trasladada al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez. Luego detuvieron a la sospechosa, que se había encerrado en la pieza que le alquilaba a la víctima. De acuerdo con lo que contó la fiscal de Homicidios Dolosos Marisol Fabbro, a cargo de la investigación, Claudia tenía entre sus pertenencias un cuchillo con sangre.
A eso de las 22 del viernes los médicos del Heca informaron que Ángela había muerto, aunque antes alcanzó a dar detalles del ataque que había sufrido.
“Las dos señoras tomaban mucho. Pero la finadita era muy buena y no molestaba a nadie; la otra todo lo contrario, se ponía violenta y hacía lío” señaló una vecina.
Claudia quedó detenida en el penal de la comisaría 18ª de barrio San Francisquito. Hoy por la mañana será acusada en una audiencia imputativa.
Ataques contra su hijo, el Triple Crimen, un búnker y amenazas con arma blanca
Claudia R., la mujer acusada por el asesinato de Ángela Ruiz, ha sido mencionada en las crónicas del crimen de los últimos años. Fue la primera esposa de Sergio “Quemado” Rodríguez, el ex barrabrava de Newell’s condenado a 32 años de prisión por el llamado Triple Crimen de Villa Moreno, ocurrido en la madrugada del 1º de enero de 2012 en Presidente Quintana y Moreno. Hasta allí llegó un grupo armado que abrió fuego con distintas armas, entre ellas una ametralladora, y como resultado fueron ultimados los militantes del Frente Popular Darío Santillán Jeremías “Jere” Trasante, Claudio “Mono” Suárez y Adrián “Patóm” Rodríguez.
El hijo de Claudia R. y el Quemado Rodríguez, Maximiliano, conocido como Quemadito y también barra leproso, había sido baleado horas antes del Triple Crimen, por lo que se consideró que la masacre de Villa Moreno fue una represalia por este ataque. El Quemadito pudo sobrevivir aunque sería asesinado en febrero de 2013 en Pellegrini y Corrientes.
En el juicio por el Triple Crimen, llevado adelante en diciembre pasado en los Tribunales locales, se conoció una escucha entre el Quemado y su hija Érica, captada el 13 de enero de 2012, mientras el acusado estaba prófugo, en la que se hace referencia a un “quiosco” que los investigadores estiman bien pudo ser un punto de venta de drogas.
La muchacha le envió un SMS pero se equivocó, ya que la destinataria debía haber sido su madre Claudia R, a quien nombra como “la Tilinga”. “¿Qué mensaje te mandé?”, dice la chica y su padre le contesta: “Acá diciendo que me quiero quedar con el quiosco porque no me preocupo por mi hijo (por entonces convaleciente del ataque ocurrido doce días antes). “Ah, no, estúpido de mierda, ese mensaje era para la Tilinga”. Le contesta el Quemado: “Me arruinás el día pelotuda de mierda”. Y la joven le responde:
“No mongui, porque me mandó un mensaje anoche diciendo que ella se va a quedar con el quiosco y que no me meta más porque me va a recagar a palos”.
En la investigación por el crimen de su hijo Quemadito, que tiene procesados al jefe de la barra de Newell’s Diego “Panadero” Ochoa, como instigador, y a otros dos imputados como autores materiales, Claudia R. hizo una extraña presentación en Tribunales catorce meses después del homicidio para intentar desvincular a los sindicados sicarios, Héctor “Porteño” R. y Sergio “Chuno” T. Dijo que los dos detenidos no eran los asesinos y aportó datos vagos sustentando otra hipótesis.
Cuando el Quemadito fue baleado horas antes de que se produjera el Triple Crimen, el muchacho dio como dirección una vivienda de Doctor Riva al 3200, la misma que Claudia R. brindó al ser detenida en junio del año pasado. Entonces, una mujer de 63 años domiciliada en Valparaíso al 3600 la sindicó como quien la había amenazado de muerte con un cuchillo del tipo tramontina, por lo cual la madre del Quemadito y ex esposa del Quemado marchó presa.
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