A mediados de año un rumor hizo ilusionar a Antonio Bonfatti, Ángel Sciara y los principales funcionarios del gabinete. Desde Buenos Aires se decía que estaba al caer el fallo sobre el reclamo de Santa Fe por la detracción de fondos coparticipables.
Sin embargo todo quedó en un rumor y el tiempo pasó. Sobrevino la campaña electoral y en la Casa Gris dieron por descontado que la decisión ya no vería la luz este año.
Por eso, cuando ayer se conocieron los dos fallos que declaran la inconstitucionalidad de las detracciones, nadie salía de su asombro. Sobre todo por el criterio de oportunidad, a 48 horas de haber sido electo un nuevo presidente que recibe la herencia y tiene que arreglar el entuerto. Por el contrario, un clima casi festivo embargaba al gobierno de la provincia. Qué decir de Miguel Lifschitz, que hará usufructo de esos recursos. El comentario era la sonrisa del futuro ministro de Economía, Gonzalo Saglione.
Contada así, la historia con final feliz para la provincia, pareciera el simple trámite de un juicio. Sin embargo tuvo implicancias políticas profundas que coincidieron temporalmente con el peor momento de las relaciones entre los gobiernos del Frente Progresista y el gobierno nacional.
En 2006 el gobierno de Néstor Kirchner decidió continuar descontando el 15 por ciento de coparticipación sin el acuerdo de Santa Fe y otras provincias. Entonces era gobernador Jorge Obeid. Cuando en 2007 asumió el Frente Progresista el reclamo tomó otro cariz.
Primero fueron reclamos formales desde la Casa Gris y el ninguneo de la Casa Rosada.
Hasta 2009, cuando Binner tomó una decisión que desató una batalla política de alto voltaje que, sumada a otras controversias, perdura hasta estos días.
Ante la falta de respuesta de Nación, Binner recurrió a la vía judicial “en defensa de los intereses de la provincia”. El gobierno de Cristina venía golpeado por el conflicto con el campo. Binner comenzaba a sacar cabeza a nivel nacional (en 2011 terminaría siendo candidato presidencial).
La Casa Gris hizo enojar a Cristina Fernández por partida doble. No sólo fue contra el gobierno ante la Corte, sino que encolumnó en el reclamo a los ex gobernadores peronistas Carlos Reutemann y Jorge Obeid, quienes desde septiembre de 2008, tras la famosa votación en el Congreso por la resolución 125, se habían pasado a la oposición. El día de la presentación ante el alto tribunal, ambos sumaron su apoyo personal, al igual que legisladores nacionales de distintos espacios, salvo los kirchneristas.
Los principales referentes socialistas hasta hoy están convencidos de que el kirchnerismo nunca perdonó haber acudido a la Corte y que ése fue el principio de todos los conflictos, que derivaron en el retaceo de fondos, la eliminación de Santa Fe del Plan Federal de Vivienda y una pésima relación institucional. Ahora que se conoce la cifra que estaba en juego se entiende por qué.
“Algún día alguien tendrá que contar los malabares que se hicieron todos estos años en la provincia para sostenerla financiera con semejantes descuentos en la coparticipación”, contaba anoche un alto funcionario del Ministerio de Economía.
El Frente Progresista celebró fallos de la Corte
Tras conocerse ayer el fallo de la Corte que declaró inconstitucional la retención de fondos coparticipables para Santa Fe llevada adelante por el gobierno central, los principales dirigentes del Frente Progresista celebraron la sentencia del máximo tribunal.
“Desde la gestión de Hermes Binner hemos administrado con mucha austeridad, hemos hecho muchísimas obras, hemos dado incrementos salariales por arriba de la inflación, pero siempre reclamando las deudas que tiene la Nación con la provincia” señaló el gobernador Antonio Bonfatti.
“Hoy (por ayer) la Corte Suprema emitió dos fallos que nos ponen muy felices a todos los santafesinos: uno es por el Fondo de Autarquía de Afip por un valor de 4.800 millones de pesos sin contar intereses, y el otro es por la detracción del 15 por ciento de la masa coparticipable a la provincia, que iban destinados a la Ansés por un valor aproximado de 19 mil millones de pesos más los intereses”, detalló el mandatario provincial.
Para Bonfatti, la decisión es una “bisagra” en la historia del federalismo en la Argentina.
“Ahora habrá 120 días para llegar a un acuerdo entre Nación y provincia. Algo no menor es que desde ahora el Banco Central tiene que dejar de hacer las detracciones que se hacen mensualmente. Esto es de aplicación inmediata, por lo cual estamos contentos todos los santafesinos, entre ellos los intendentes y presidentes comunales ya que el 13,5 por ciento se coparticipa”, explicó.
“Tanto en la gestión de Hermes Binner, como en la actual, hemos administrado con mucha austeridad, hemos hecho muchas obras, dado aumentos salariales por encima de la inflación, y siempre reclamando las deudas que tenía la Nación con la provincia. Esto se va a traducir en muchas obras y en infraestructura que la provincia viene reclamando desde hace tanto tiempo”, agregó Bonfatti.
Para el mandatario santafesino, los recursos que reciba Santa Fe a partir de la aplicación del fallo le permitirá a la administración provincial “reparar viejas deudas históricas que tenemos en infraestructura”.
En tanto, el gobernador electo Miguel Lifschitz anticipó que “la totalidad de los fondos serán para obra pública”. Los recursos que recuperará la provincia serán destinados a rutas, hospitales, escuelas, obras de saneamiento, cloacas, agua potable y servicios, según el senador. “Obras necesarias para mejorar la calidad de vida”, resumió Lifschitz.
El mandatario electo se mostró entusiasmado por el fallo de la Corte Suprema por el cual se ordenó cesar “de inmediato” de realizar descuentos de coparticipación a la provincia de Santa Fe. Lifschitz aclaró, de todos modos, que el dinero no llegará de una sola vez, sino que seguramente habrá que “sentarse a negociar con el futuro gobierno (nacional) como se devolverán los fondos”.
Por su lado, el vicegobernador Jorge Henn sostuvo: “El gobierno de Cristina Kirchner jamás dio una respuesta, ni siquiera un canal de diálogo. La Corte Suprema puso las cosas en su lugar”.
También el ex gobernador Binner se mostró satisfecho con el fallo judicial. “Se hizo justicia. Tras años de lucha, la Corte Suprema falló en favor de los santafesinos restituyendo a las provincias los fondos de coparticipación que el gobierno nacional retiene desde 2006. Este fallo termina con la discriminación que sufría Santa Fe y cumple con los derechos que establece nuestra Constitución”.
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