Argentino afronta esta tarde su primer desafío en el campeonato de Primera D en territorio ajeno frente a Lugano, equipo que estará obligado a realizar una muy buena campaña si es que quiere permanecer en la categoría. Con una mezcla entre jugadores nuevos y viejos, el conjunto de barrio Sarmiento buscará empezar la temporada con un triunfo en condición de visitante para demostrar que este año está en plenas condiciones de dar pelea por la cima de la tabla de posiciones.
La misión no será para nada fácil, ya que el Sala dispone de un plantel bastante limitado en cuanto a jugadores de jerarquía a diferencia de los principales candidatos al título como Atlas, San Martín de Burzaco o Deportivo Riestra.
Para colmo se fue el gran artillero de la última temporada, Gonzalo Mazzia, en tanto que otros jugadores claves como Leonardo Padilla, Martín Villegas, Ramiro Lago y Franco Calero también abandonaron la institución.
Pero los entrenadores Walter Bello y Silvio Conti no se quedaron de brazos cruzados ante el éxodo de jugadores y poco a poco fueron incorporando refuerzos para suplir las bajas. Alejandro Herrera, Nahuel Schiavo, Sebastián Fernández, el mexicano José Luis Álvarez Mellín, Matías Ponce, Joel Abacca, Matías Sayal y Maximiliano Romeo son algunos de los futbolistas que se sumaron al plantel durante la pretemporada, además de Pablo Verón y Mauro Belén, quienes en un principio habían dejado la institución pero finalmente terminaron volviendo. De esta manera, con varias caras nuevas pero con la misma ilusión de siempre, Argentino se dispone a comenzar la temporada con el pie derecho con el objetivo de mejorar la pálida campaña del campeonato pasado, algo que a priori no debería ser tan difícil.
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