Lisandro Olearo
El capítulo XVI de Eden Park con Agustín Pichot como entrevistado -emisión que tiene como integrante a El Hincha, en su staff permanente-, dejó mucha tela para cortar. Después de una primera parte, en la que el ex vicepresidente de World Rugby analizó el rugby mundial, definiendo de “egoísta” la decisión de Nueva Zelanda de cortarse en solitario, jugar un Súper Rugby doméstico y decidir qué jugar en 2021, dejando fuera a Argentina. El Hincha recopila más declaraciones salientes del ex capitán de Los Pumas que seguramente serán materia de debate.
Pichot colgó los botines y se convirtió en el líder que necesitaba el rugby argentino para poder lograr ingresar en una competencia anual y estable. Ficha comparó ese período post Francia 2007 con el presente, en el que la pandemia golpeó muy duro.
“Es un reset para todos, la diferencia es que no es para uno sólo, esto no es como fue para Argentina en el 2008, que fue Argentina contra el Mundo, ahora es Argentina con el Mundo. Porque en esa éramos el Quijote contra todos. Nos decían ‘el Seis Naciones no, esto sí, esto no’, y nosotros preguntando cuáles eran las opciones A y la B, ‘es más o menos por acá, los contratos’, nos retaban, y Nueva Zelanda pedía que Argentina tenga un sistema ordenado de Pladares y armábamos todo, y al instante nos decían ‘ahora no se puede’. Y nuestra respuesta fue: ‘bueno vamos a la Vodacom’, todo era Plan A, B, C, D, teníamos todo. Se fue dando todo, lo ordenamos, armamos el tren, lo metimos a andar. Estábamos por ir a una segundo ciclo divino (de Jaguares) y para asentar el proyecto, y ¡pum! Nos pegaron de costado, el virus nos hizo blum. Pero esta bueno, no nos podemos quejar”, dijo Agustín.
Y agregó: “Una cosa es levantar con cinco franquicias y jugar un torneo doméstico como puede hacer Sudáfrica, y otra cosa es nosotros.
Volvemos al ‘ocúpense de Argentina, arréglense solos’, miras para los costados tenes Brasil, Uruguay, Chile, que son nuestros aliados, y que gracias a Dios están y arrancamos a trabajar hace seis años. Imagínense el mismo escenario actual, si no hubiéramos hecho todo lo que hicimos en América, no habría ni plan A, B, C”.
La construcción de Jaguares, no fue fácil y no se dio de la noche a la mañana. El desembarco de Argentina en Sanzaar tuvo que pasar muchos filtros. Jaguares tuvo un pico de rendimiento en 2019, pero se dio porque un proyecto que tenía detrás diez años de trabajo. Muchos se preguntan: ¿Cómo no instalan a Jaguares en Europa o en Sudáfrica o en Australia?
“Es facilísimo decirlo, vamos a jugar a España. Alguien sabe lo que vale armar ese proyecto, cuesta entre seis y doce millones de euros. No es que la hacemos más barato o que no se pensó, se recontra pensó. Fui a Barcelona diez veces, me junte con Barcelona, con la Federación Española, con Celtic League, con el Seis Naciones, también nos juntamos con Sudáfrica para ver de un equipo en el Pro 14 pero cuesta tres millones para empezar”, dijo Pichot.
El ex vicepresidente de World Rugby, dio más precisiones sobre costos, beneficios y riesgos en el Mundo del Rugby profesional.
“A Italia le costó en 2011 para meter el primer equipo en la Celtic League, de llave tuvo que pagar tres millones de euros. En ese momento ese monto era el ochenta por ciento del presupuesto de la UAR. Son posibilidades la de sumar un inversor privado, pero bajo esa situación entras en otro proceso que en la UAR se analizó, y por suerte logramos, gracias a un gran sacrificio del rugby argentino, que los Jaguares sean un proyecto cien por ciento nuestro. Hay un línea muy fina donde el equipo empieza a ser el fin y no el propósito para que el seleccionado nacional sea mejor. No digo que no, son distintas cosas, una vez que vos entras en el individualismo del inversor lógicamente esa persona va a querer ganar plata. Los que mejor lo han resuelto son los neozelandeses, ellos van cambiando siempre en función de los All Blacks, y los casos en Sudáfrica que también es tirante la relación, entras en un lugar difícil. Ahora después que lo armas tenes que ver el camino del juego, y si es muy caro, quién paga la cuenta, y que no sea el rugby argentino”, expresó Agustín.
En referencia a la convivencia entre una Unión y un inversor privado, Pichot dijo: “Me gusta que el rugby argentino tenga independencia. Lo digo con mucho orgullo, Argentina fue de los pocos países que no pidieron los préstamos del fondo de emergencia, que fue dividido en diez países nada más. Eso quiere decir que tenemos soberanía sobre el juego y los ingresos que manejamos lo hacemos con mucho cuidado. No hubiese dado nunca equity (NdR: una empresa generalmente se conoce como patrimonio de los accionistas), sobre un Seis Naciones, que es un producto que vuela. Jamás, me tenes que matar antes. Claramente había intereses creados de algunos Ceos, que esa inyección de capital les daba mejor los libros a fin de año, y tendrán un bono más grande, yo no lo haría nunca”.
Agustín Pichot: “Nueva Zelanda es egoísta y toma una decisión que nos involucra a todos”
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