Estela Barnes de Carlotto, presidenta de la asociación Abuelas de Plaza de Mayo, recibió ayer el título de doctora honoris causa otorgado por la Universidad Nacional de Rosario.
Luego del acto formal de reconocimiento, Carlotto brindó una conferencia que duró media hora y dejó al público –que desbordó el ECU de San Martín al 700 con exponentes de distintas generaciones– aplaudiéndola de pie y emocionado hasta las lágrimas. Su discurso estuvo signado por las elecciones presidenciales: llamó a defender las políticas de derechos humanos construidas en los últimos 38 años y la democracia. “Podemos vivir en paz a pesar de las diferencias. No van a conseguir que nos declaremos la guerra entre nosotros. Algunos pensamos en blanco y otros en negro, pero en algún gris vamos a encontrarnos”.
“El reconocimiento es siempre un mimo”, consideró la presidenta de Abuelas, minutos antes de recibir el doctorado. Casi una hora después, admitirá que siente un poco de pudor y vergüenza ante tanta demostración de afecto, pero que igual le gustan: “Ayudan a seguir”, explicó, apelando a una distinción: “Creen que somos especiales, pero somos simples mujeres que hacemos lo que debemos, lo que sentimos y lo que pudimos
hacer”.
Es tal vez esa condición –genuina– de simpleza, la que la hace especial. Estela de Carlotto se mueve con comodidad en cualquier ambiente y mantiene viva su esencia: no sólo lucha, es mujer, mamá, abuela. Cuando habla de su nieto recuperado, Guido, se le dibuja una sonrisa de sincero enamoramiento. Su discurso durante la conferencia fue el de una mujer naturalmente educadora y la sinceridad de su lucha se reflejó en la mirada y el silencio respetuoso y atento del público.
“Estela”, así le dicen, habló poco de ella. Todo se refirió a la lucha de las Abuelas y las conquistas, en plural. Nunca se olvidó de sus compañeras. Eso incluyó mencionar más de una vez a Darwinia Gallicchio, histórica Abuela rosarina. Por eso recordó que ellas siguen buscando a sus nietos, para pedir que los que saben o vieron algo, cuenten. “Y a los jóvenes que tienen adentro algo que no encaja, que no se queden con la duda. Los esperamos con mucho amor”.
Carlotto realizó, durante la conferencia de prensa y la charla pública, un recorrido del 24 de marzo de 1976 hasta ahora. “El saldo que estamos haciendo es muy positivo: no tiene retorno. Los organismos de derechos humanos vamos a mantener lo ya hecho, venga quien venga a la presidencia”, advirtió. Las elecciones nacionales marcaron su discurso. “Yo no voy a tomar posiciones, en el sentido de partido político. Lo que quisiera saber es qué proyectos tienen los candidatos sobre derechos humanos. No vamos a permitir que con el cambio de gobierno haya una marcha atrás”, concluyó.
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