El ex jefe de la Policía de Santa Fe, Hugo Tognoli, detenido en el penal de Las Flores en el marco de una investigación por narcotráfico, reprochó ayer al gobierno provincial por no haberlo “defendido hasta el final” y volvió a definirse como “el jamón del medio” en la “disputa entre la Nación y la provincia”. Además, acusó a Rafael Bielsa y Agustín Rossi de ser los responsables políticos de su detención. Por su parte, el jefe del bloque de diputados del FPV salió a cruzarlo en la misma tarde de ayer al referir que dos procesamientos “en dos causas diferentes demuestran su estrecha vinculación con las organizaciones que manejan el delito narco en la provincia de Santa Fe”.
En un diálogo exclusivo con el programa “De 12 a 14”, de Canal 3, el comisario fue consecuente con sus declaraciones de los últimos meses, en las que intenta manifestarse como una víctima de un entramado político. «Soy el jamón del medio, quedé en medio de una disputa entre la Nación y la provincia», aseguró Tognoli, quien fue detenido por orden del juez federal Carlos Vera Barros en marzo de este año –ya había tenido una primera detención en octubre del año pasado–, acusado de formar parte de una «empresa criminal conjunta» con Carlos Andrés Ascaíni, alias «el Vasco», que reside en la localidad santafesina de Villa Cañás, procesado por narcotráfico, y dos policías: el comisario Néstor Beto Fernández y el cabo Carlos Quintana, sobre quienes ayer el juez de la causa tomó medidas (ver aparte).
«Si me tenían tanta confianza para nombrarme jefe de la Policía me tendrían que haber defendido hasta el final», añadió en referencia al gobierno provincial, al tiempo que reconoció que pensó que el gobierno le había “soltado la mano”.
También aprovechó la oportunidad para acusar el ex canciller Rafael Bielsa y el legislador kirchnerista Agustín Rossi: «Bielsa mandaba anónimos, que figuran en el expediente; y cuando me dictaron la falta de mérito Rossi salió a decir que la causa no se había terminado. A partir de ahí yo estaba esperando todos los días para saber cuándo iba a volver a estar preso».
“Claudicación de la política”
El diputado nacional Agustín Rossi, nombrado por el testimonio de Tognoli, respondió inmediatamente a las acusaciones y definió como llamativo que “los argumentos de Tognoli sean tan coincidentes con recientes declaraciones de Hermes Binner”.
“Ambos hablan de una causa armada y coinciden en que el ex jefe de Policía está preso sin motivos”, dijo y agregó: “Esas palabras, en boca de Tognoli, son parte de la estrategia de defensa. En boca de Binner, son el mejor símbolo de la claudicación de la política respecto a la lucha contra el narcotráfico”.
“Hugo Tognoli tiene dos procesamientos, dictados por dos jueces distintos, en dos causas diferentes –siguió diciendo Rossi– que demuestran su estrecha vinculación con las organizaciones que manejan el delito narco en la provincia de Santa Fe”.
“Está claro que Tognoli y Binner tratan de politizar la causa para distraer la atención sobre la cuestión de fondo que es el inocultable vínculo de la policía provincial con el narcotráfico”, remató.
El caso
Según la investigación, en 2009 Ascaíni llamó telefónicamente a la seccional de Villa Cañás para averiguar a quién pertenecía una camioneta que lo seguía desde hacía unos días. Mediante el uso de una clave de seguridad para acceder a la base de datos del Registro Nacional de Propiedad Automotor (RNPA), que había sido entregada por Tognoli a Fernández (entonces jefe de la brigada Venado Tuerto de la ex División de Drogas Peligrosas), el cabo Quintana de la seccional de Villa Cañás le avisó a Ascaíni que lo seguía la PSA.
El fiscal del caso, Juan Patricio Murray, sostiene que a partir de ese aviso Ascaíni logró eludir la detención de la PSA, que no lo encontró en su domicilio cuando lo allanó.
Y que al tomar conocimiento del uso indebido de la clave para dar aviso al hombre procesado por narco de que era perseguido, Tognoli no reprochó esa actitud a sus subordinados ni la denunció.