Edición Impresa

Reactivan segundo escape en la mina

Pudieron remover la pieza rota de la máquina que llegó más profundo.

El ministro de minería de Chile, Laurence Golborne, confirmó ayer que los técnicos que trabajan en la perforación de la segunda vía de escape para rescatar a los 33 mineros que permanecen atrapados en el fondo de la mina San José desde el 5 de agosto pasado lograron retirar las partes de una pieza que se había desprendido de la tunelera y bloqueaban el ducto conocido como “alternativa 2” o “plan B” y las tareas podrán reanudarse en breve.

La perforadora Schramm T-130 había llegado hasta los 268 metros de profundidad cuando se quebró su cabezal al chocar contra un enorme perno de hierro.

“Lo que resta ahora es ingresar una cámara de video para ver las condiciones y evaluar en qué estado quedó el pozo”, declaró el ingeniero René Aguilar, coordinador de las operaciones de perforación

Los familiares de los mineros recibieron felices la noticia porque temían que el bloqueo del túnel obligara a desechar el “plan B”.

En tanto la perforadora Strata 950, del “plan A”, ya sobrepasó los 250 metros de profundidad del total de 700 metros que debe recorrer.

Mientras tanto continúan los avances para instalar la plataforma petrolera que encarará el “plan C”, que avanzará más rápidamente, y se descartó por “riesgosa” la propuesta del ingeniero Miguel Fort, o “plan D”, para intentar llegar a los mineros a través de la boca del yacimiento abriéndose paso con dinamita.

La cápsula de rescate

A todo esto, la Marina chilena trabaja en el diseño de una cápsula de acero que se piensa utilizar para extraer de las profundidades, uno a uno, a los 33 mineros atrapados en la mina.

El cilindro se desplazaría por uno de los tres ductos que se construyen para sacar a los mineros de la profundidad en la que se encuentran atrapados desde el 5 de agosto.

La cápsula de rescate será confeccionada con una plancha de acero de cuatro milímetros de espesor y tendrá 54 centímetros de diámetro exterior para que quepa en los ductos, explicó un documento entregado por los Astilleros y Maestranzas de la Armada (Asmar), a los que se encargó la tarea.

El largo máximo de la cápsula será de 2,5 metros para que un hombre quepa parado en su interior.

Según explicaron los técnicos de la Marina, la cápsula contará en su exterior con ocho ruedas en cada extremo que impedirán que el cilindro golpee contra las paredes. Dentro de la cápsula habrá una reserva de oxígeno que el rescatado utilizará según sus necesidades. Los tanques de oxígeno permitirán un abastecimiento de tres horas, aunque se calcula que el ascenso de un minero tomará la mitad de ese tiempo.

Además, la cápsula tendrá un sistema de escape de emergencia para el caso de que ésta se trabe dentro del ducto, ante lo cual la persona rescatada podrá abrir la parte inferior del cilindro y descolgarse otra vez hasta el fondo por una cuerda que habrá dentro de la cápsula.

Comentarios