Oficialmente, Luxemburgo es partidario de que el Reino Unido se quede dentro de la Unión Europea (UE). Pero entre bastidores, el pequeño país, convertido en un importante centro financiero, no quiere dejar escapar las oportunidades de negocio de un posible Brexit (separación de la comunidad continental).
“Varios periodistas más o menos bienintencionados me preguntan si la salida de la UE del centro financiero londinense daría un impulso a la plaza financiera luxemburguesa”, dijo recientemente el ministro de Finanzas del país, Pierre Gramegna. “Pero no comparto este análisis, aunque estoy contento de que distintos actores tengan en cuenta a Luxemburgo en caso de Brexit” en el referéndum del próximo jueves 23 de junio, completó el funcionario.
El país, uno de los fundadores de la Unión Europea y donde nació el actual presidente de la Comisión, Jean-Claude Juncker, cree sin embargo que a largo plazo una UE sin el Reino Unido sería “menos fuerte comercialmente”.
Varios analistas indican sin embargo que Luxemburgo podría sacar grandes beneficios del Brexit, que supondría que las instituciones financieras de Londres perderían su pasaporte europeo.
En juego: 100 mil empleos
La cuestión es clave para la City de Londres, donde según cifras del Ministerio de Finanzas británico, hay 100.000 empleos directamente relacionados con la exportación de servicios financieros a la UE. En caso de Brexit, una parte de estos servicios podrían ser relocalizados en el continente.
En Luxemburgo, el llamado Alto Comité de la Plaza Financiera, un órgano que reúne representantes del Ministerio de Finanzas y de las principales compañías del país, asegura haber estudiado todas las opciones.
Por su parte, el sector bancario, que ya tiene 143 establecimientos, espera en caso de Brexit ver llegar nuevos bancos, sobre todo no europeos, que ahora tienen la sede en Londres.
Lobbys por bancos
“Vamos a apostar por el headquartering” –del inglés headquarter: sede–, es decir, intentar que los grandes grupos internacionales trasladen su sede a Luxemburgo, explica Serge de Cillia, director general de la Asociación de Bancos y Banqueros Luxemburgueses.
Este lobby bancario se interesa sobre todo por el negocio de la gestión de fortuna y de los fondos de inversión, y deja a otras plazas financieras, como París, la banca de negocios. La capital francesa ya tiene una agencia llamada Paris Europlace que podría acoger negocios que ahora están en Londres.
De Cillia asegura haber recibido varias llamadas de bancos para instalarse en Luxemburgo. Y según el periódico británico The Times, HSBC y J.P. Morgan ya estarían estudiando transferir sus actividades al país.
Sin embargo, incluso en caso de Brexit, el cambio no se hará de un día para otro. “No todo se decidirá en un mes”, advierte De Cillia, recordando que el proceso de registro de sociedades es muy largo.
Siempre China
Los seis principales bancos chinos ya están instalados en Luxemburgo pero otros de segunda división, según el ministro Gramegna, podrían arribar en caso de Brexit. Luxemburgo y Londres compiten para atraer los bancos chinos y el pequeño país ya tiene en su territorio la sede del banco asiático de inversión para infraestructuras (AIIB).
Por el momento, la media de los últimos seis sondeos del instituto de opinión What UK Thinks pone a los campos del Sí y el No en igualdad, 50 a 50 por ciento, pero no tiene en cuenta a los indecisos.
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