Ezequiel Nieva
La política santafesina entró de manera definitiva en modo electoral. Sin hacer aspavientos, unos y otros ya se lanzaron a recorrer la provincia y sus propios territorios al amparo de las profusas publicidades en redes sociales con las cuales buscarán llegar al electorado en esos atípicos tiempos de coronavirus. La que viene será una campaña diferente, no sólo por las medidas de cuidado que excluyen todo tipo de acto masivo, sino –principalmente– por la sensación de hartazgo que atraviesa a la ciudadanía después de un año y medio de pandemia.
El calendario electoral está en marcha con una particularidad que pasa inadvertida y, sin embargo, tiene vital importancia para los intereses del gobierno provincial. Este año elegirán intendentes 14 municipios: Armstrong, Las Toscas, Recreo, Fray Luis Beltrán, Puerto General San Martín, Roldán, El Trébol, San José del Rincón, Romang, Suardi, San Guillermo, Florencia, San Vicente y Sauce Viejo. Las dos últimas, recientemente declaradas ciudades por la Legislatura, votarán por primera vez el cargo de intendente.
De esas 14 localidades, seis están gobernadas por el PJ (Fray Luis Beltrán, Puerto San Martín, Roldán, El Trébol, Florencia y Sauce Viejo) y las otras ocho (Armstrong, Las Toscas, Recreo, Rincón, Romang, Suardi, San Guillermo y San Vicente) por la oposición: Frente Progresista, PRO y distintas vertientes de la UCR.
Aunque la atención esté puesta casi en forma exclusiva en la categoría de senadores y diputados nacionales, la elección de intendentes en 14 de las 59 ciudades de la provincia es una prueba de fuego para el gobierno de Omar Perotti. Con minoría en las dos cámaras legislativas y con las principales ciudades en manos del Frente Progresista, el oficialismo buscará hacerse fuerte en esta elección de medio término en aquellas localidades donde se elegirán cargos ejecutivos.
Ya a fines de 2020 el gobierno de Perotti dio una señal de que busca fortalecerse a través de la construcción territorial. Cuando terminaba el primer año de pandemia, el gobernador encabezó un acto político en Sauce Viejo –una de las ciudades que votará cargos ejecutivos– convocado por intendentes y presidentes comunales del PJ. La excusa formal fue realizar un repaso del primer año de su gestión, pero en los hechos funcionó como un aval de los mandatarios locales hacia el gobierno provincial, que por esos días trataba de capear la tormenta política derivada de la causa del juego clandestino que enfrentó públicamente a los senadores con la Casa Gris.
El segundo movimiento en el mismo sentido fue el lanzamiento, a principios de junio, de Hacemos Santa Fe, el espacio interno del PJ conducido por Perotti y que tiene como cara visible al senador nacional Roberto Mirabella. Según el propio Mirabella, la formalización del perottismo santafesino era “una demanda de dirigentes, intendentes y presidentes comunales”.
Hacemos Santa Fe se integra al mosaico partidario que conforman los otros sectores del peronismo, como la Corriente Nacional de la Militancia, el Movimiento Evita, La Cámpora y el Nuevo Espacio Santafesino (NES) de los senadores provinciales. Según sus referentes, uno de los principales objetivos es contar con una herramienta para la construcción electoral a través de la cual el gobernador Perotti buscará incidir en el armado de las listas locales –intendentes, concejales y comisiones comunales– y, sobre todo, en la definición de las candidaturas nacionales.
Este último viernes Mirabella inauguró la sede Rosario de Hacemos Santa Fe, la primera en la provincia. En esa ocasión el senador nacional admitió: “Nos costó mucho transitar un proceso de construcción política para volver a gobernar la provincia. Aprendimos a construir un frente diverso, conviviendo en el mismo camino. Lo que estamos haciendo en Santa Fe es parte de una construcción con nuestra propia identidad, con un profundo sentido federal, creyendo en la autonomía de Santa Fe, pero aportando a un proyecto nacional y popular”.
Territorios en disputa
Resultará de sumo interés observar cómo se desarrollará la elección de intendentes en las localidades del departamento San Lorenzo, donde el senador Armando Traferri –archienemigo de la Casa Gris– buscará incidir en los armados, del mismo modo que el gobierno. En ese departamento vencen este año los mandatos de tres intendentes del PJ: José María Pedretti (Roldán), Mariano Cominelli (Fray Luis Beltrán) y Carlos De Grandis (Puerto General San Martín). Los dos últimos participaron el 4 de junio de presentación de Hacemos Santa Fe.
También será interesante lo que ocurra en el departamento La Capital. Allí se ponen en juego tres intendencias: dos están en poder del Frente Progresista (Omar Colombo en Recreo y Silvio González en Rincón) y la restante (Sauce Viejo, donde gobierna el ex goleador de Rosario Central y de Colón Pedro Uliambre) está en manos del PJ. En el departamento La Capital se observa con nitidez el reparto de poder que arrojaron los últimos comicios: el senador Marcos Castelló, perottista de la primera hora, responde a la Casa Gris, mientras que la principal ciudad, Santa Fe, está gobernada por el intendente Emilio Jatón del Frente Progresista.
Hacemos Santa Fe: una pieza más para el rompecabezas del PJ provincial
Dos años atrás, Perotti se consagró gobernador a partir de un amplio acuerdo partidario del que participaron todas las líneas internas del PJ. Ya en gestión, en forma lenta pero sostenida, de la mano de Mirabella comenzó la construcción política del perottismo. Sin posibilidad de reelección, vedada por la actual Constitución, el desarrollo territorial de esa corriente puede funcionar como eje integrador y como combustible hacia 2023.
Datos duros
El 12 de septiembre se realizarán las primarias nacionales y locales y el 14 de noviembre serán las elecciones generales. Ese día la provincia de Santa Fe renovará sus tres senadores nacionales, 9 de los 19 diputados nacionales, se elegirán concejales en las 59 ciudades y comisiones comunales en las 306 comunas de la bota, además de 14 intendentes.
Como ocurre en cada elección de medio término, habrá dos sistemas y dos padrones en simultáneo: se utilizará la boleta única para los cargos locales (en los cuales votarán todos los santafesinos y santafesinas mayores de 18 años) y la boleta sábana para las categorías senadores y diputados, para las cuales están habilitados para sufragar en forma optativa los jóvenes de entre 16 y 18 años.
El padrón general provisorio de la provincia de Santa Fe consta de 2.701.619 ciudadanos y ciudadanas, a los que se sumarán –para las categorías nacionales– alrededor de 70 mil jóvenes de 16 y 17 años que pueden votar para senadores y diputados, aunque no están obligados por ley. Se estima que para los comicios de septiembre y noviembre habrá 8.200 mesas distribuidas en 1410 locales de votación en todo el territorio santafesino.
Sin hacer demasiado ruido, en un contexto atípico signado por la pandemia del coronavirus, la crisis económica y la incertidumbre, los distintos frentes políticos de la provincia avanzan con sus respectivos armados y sus alianzas. Todavía no es tiempo de nombres propios, pero lo cierto es que no hay tantos casilleros como posibles candidatos. Una vez más, las primarias funcionarán como ordenador de la política electoral. Pero ese será tema para futuras entregas.
Perotti se apoya en sus intendentes y muestra poderío territorial
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