El Laboratorio Industrial Farmacéutico (LIF) y la Universidad Nacional del Litoral anunciarán mañana el desarrollo de fármacos contra la tuberculosis. El proyecto estará financiado parcialmente por la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica y fue seleccionado en el marco de una convocatoria de la Nación para la presentación de propuestas que tuvieran como meta el desarrollo de medicamentos estratégicos que la población necesita y demanda y que los mercados desatienden, con el objetivo de innovar y desarrollar productos y técnicas en el ámbito de la salud. Del anuncio participarán el ministro de Salud, Mario Drisun; los miembros del directorio del LIF, Carlos Arques, Guilleromo Cleti, Diego Bruno y César Salomón; el gerente general, Roberto Ganin, y el rector de la Universidad Nacional del Litoral, Albor Cantard.
El proyecto del Consorcio Público UNL–LIF está orientado a apoyar el sistema de producción pública de medicamentos tuberculostáticos a través de la optimización y puesta a punto de la tecnología necesaria para la producción de dichos medicamentos.
Mediante la firma de un convenio con la Nación se obtendrá un monto de 23,5 millones de pesos que posibilitaran este desarrollo. La propuesta recibió el nombre de “Generación de nuevas capacidades para el desarrollo de medicamentos tuberculostáticos considerados críticos, para fortalecer el sistema de salud público nacional” y será financiada por el Fondo Argentino Sectorial (Fonarsec) de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica, que está bajo la órbita del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación.
“En principio lo que tiene es el desarrollo de cuatro especialidades medicinales tuberculostáticas de primera línea. La importancia de este desarrollo radica en que hay muchos inconvenientes en la provisión, en función de que muchas no se producen en el país y otras que sí se producen están con una oferta muy concentrada, con lo cual siempre se evidencian dificultades para la normal provisión y eso impacta en los tratamientos y favorecen la aparición de tuberculosis multirresistentes que ya son mucho más complejas para resolver”, explicó Carlos Arques, miembro del directorio del LIF.
El trabajo tendrá un período de ejecución de tres años. Sus impulsores plantean como hito principal lograr la obtención de los lotes de prueba de cinco especialidades tuberculostáticas: rifampicina + isoniacida + pirazinamida (triple asociación); etambutol; rifampicina + isoniacida (doble asociación) e isoniacida (de 300 y 100 miligramos). “Este es el objetivo principal pero tiene otros colaterales como es el desarrollo de la integración de nuestro laboratorio productor de fármacos de la provincia con la Universidad. Esa relación tiene 20 años, es una relación que se ha ido complementando, más integral, más diversificada, lo cual es un hito porque hemos constituido un consorcio público-público entre la UNL y el laboratorio para llevar adelanta nuestra tarea”, agregó Arques.
“Con este proyecto, el consorcio se propone instalar a escala piloto la tecnología necesaria, para luego otorgar respuesta a las necesidades de medicamentos planteados para la tuberculosis, en cantidades estables y suficientes y a valores razonables en función de los costos de producción, beneficiando a los sectores con pocas posibilidades que tendrán acceso a ellos”, concluyó.
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