Con una convocatoria de inscriptos que superó las expectativas de los organizadores, comenzó el ciclo 2013 de la Cátedra del Agua, en el auditorio de la Sede de Gobierno de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), de Maipú 1065. La primera clase giró sobre “Cultura y agua” y estuvo a cargo de su director, Aníbal Faccendini, y del músico Jorge Fandermole. El espacio, que funciona desde 2008, participó a fines del año pasado en la confección de un proyecto de ley a nivel nacional que propone declarar el agua como un bien y un derecho humano escencial y, en consecuencia, sacarla de un esquema tarifario para incluirla dentro del presupuesto del Estado, como salud y educación: “Presupuesto público a un derecho público, en el sentido que es un derecho de todos y de cada uno”, explicó Faccendini.
Planteado como un ámbito de debate, reflexión e intercambio la cátedra pretende posicionarse como un espacio social y académico del que surjan las necesidades de la población. “Así como en la reforma del Código Civil también tenemos un alto grado de participación en las audiencias públicas que organiza el Ente Regulador de Servicios Sanitarios (Enress)”, aseguró Faccendini.
El titular de la cátedra también contó que algunos de los logros consumados a lo largo de cinco años de trabajo fue el de conectar a la sociedad y el Estado para que encuentren soluciones a problemas concretos como la falta de agua en los espacios públicos. “El municipio colocó bebederos porque cuando planteamos el conflicto sostuvimos que eran áreas públicas pero con una mentalidad privatizada ya que se vendía el agua embotellada pero no había acceso libre a ella”, aclaró.
Cultura y agua
“El agua es un bien público y en manos del mercado se seca”, sentenció el académico, quien además explicó que existe un paradigma cultural respecto a su consumo y que está relacionado con la primera modernidad surgida tras la Revolución Industrial. “Ese concepto responde a un andamiaje profundamente positivista que ve la naturaleza como un objeto a conquistar o dominar. Si bien esa etapa fue necesaria para el desarrollo, es necesario que nos replanteemos que todo crecimiento tiene un límite”, aseguró.
Por su parte, Fandermole hizo hincapié sobre la necesidad de abordar la problemática del agua desde una mirada multidisciplinaria. “Tiene que haber una apertura desde una posición que tenga que ver con el arte y somos varios los que tenemos intenciones de incorporar otros lenguajes para que esos conflictos no se analicen solamente desde el aspecto geopolítico”, explicó el músico rosarino, quien además es ingeniero agrónomo, aunque no ejerce.
Finalmente, Faccendini reiteró que “todo consumismo implica una desvalorización del ecosistema y que además es un profundo acto de injusticia social, lo que quiere decir que en ese consumismo hay alguien que se queda sin poder acceder a algo y esto ocurre con el agua”. Por eso, aseguró que el fin de la cátedra es colaborar para que haya más conciencia con respecto a la escasez social del bien, producto de la falta de inversiones de políticas públicas, y también por la escasez física que se relaciona directamente con un hecho de la naturaleza”.
Diversificación y horizontalidad
La primera clase de la Cátedra del Agua contó con más de cien inscriptos de distintas edades y diversos niveles de formación. “Eso enriquece los diálogos porque no creemos en la clase vertical sino horizontal en la que haya un proceso combinado de conocimientos”, aclaró.
Otra e las instancias de abordaje del profesorado es el Observatorio del Agua en el que se plantean diferentes problemáticas sociales y que es un organismo funcional a las demandas de la población. Al respecto, Faccendini dijo que “no sólo atienden reclamos de sectores vulnerables, ya que en una ocasión hubo un caso de un matrimonio que durante 40 días no tuvo agua en un barrio residencial, lo que mostró desidia por parte de la empresa y por ello rompió con varios mitos”.
PRÓXIMAS CLASES
La Cátedra del Agua cuenta con el apoyo del decano de la Facultad de Ciencia Política, Franco Bartolacci, y del rector de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Darío Maiorana. Las próximas clases serán los miércoles 25 de septiembre y 30 de octubre, ocasiones en que se abordarán los temas “Pensando en una nueva ética para el agua” y “Agua y conflictos internacionales. Nuevas tecnologías”, respectivamente. El cronograma continuará hasta diciembre.
Comentarios