Las lesiones oculares forman parte de los daños más silenciosos en materia de salud. La pérdida de visión es progresiva pero el paciente lo registra cuando el cuadro es avanzado y recién en ese instante realiza la consulta médica. Por otro lado, la proximidad de la primavera y la mayor exposición al sol; la rutina que incluye varias horas delante de la computadora, y la falta de atención en la calidad de la alimentación forman una combinación peligrosa para conservar una buena visión.
El oftalmólogo Gabriel Bercovich expuso a este medio los peligros que acechan a la salud ocular y cómo protegerla, a pesar de la edad, la estación del año y los avatares del día a día.
Sobre la proximidad de la mayor exposición al sol, el doctor explicó que se debe evitar mirar directo al sol y, además, utilizar anteojos adecuados. “Teniendo en cuenta el clima y tiempo que se aproxima, es recomendable no exponerse con los ojos abiertos directamente al sol, la mirada directa a los rayos solares puede generar trastornos maculares importantes. Por otra parte, otro modo de proteger los ojos es protegerse con lentes de color o polarizados, para evitar la fotofobia, congestión y sequedad que puede traer la exposición al aire libre”.
La alimentación suele ser un factor poco relacionado con la salud visual, por eso Bercovich manifestó que la ingesta de frutas y verduras favorece tanto a la retina como la mácula, acompañados –claro está– por controles anuales.
“La mejor manera de cuidar la salud visual a toda edad es la prevención, controlarse anualmente a pesar de no presentar sintomatología alguna, ya que es donde se pueden detectar problemas refractivos, glaucomas, maculopatías, neuropatías, lesiones vasculares y tumorales, entre otras lesiones”, detalló.
Si bien existen diferentes tipo de ejercicios de relajación y de estimulación visual, Bercovich apuntó que lo más importante es “aprovechar la visión lo más que se pueda”. Ante esta afirmación, el oftalmólogo comentó que muchos pacientes han expuesto su temor a “gastar esos músculos” y por ende tratar de no dedicarse tanto a fijar la mirada. Sin embargo, el doctor explicó que cuanto más se ejerciten los músculos, mejor visión se obtendrá.
“La mejor ejercitación para los ojos es saber que por utilizarlos no se desgastan, hay pacientes que por tener ciertas afecciones prefieren no fijar la mirada, o no leer por temor a que se arruine su visión. Resulta increíble pero he recibido comentarios de este tipo en varias oportunidades. La realidad es que la mejor manera de ejercitar nuestra visión es utilizarla en la medida en que podamos”. Y agregó: “Otro ejemplo son los pacientes cercanos a los 40 años que comienzan con presbicia y requieren de una ayuda de lentes para leer. Se les recomienda además de indicarle los lentes, que cuando haya buena iluminación, buen contraste o letras no tan chicas, intenten leer sin los lentes así se ejercitan los músculos, a un largo plazo se pueden llegar a notar mejoras”.
La gran pantalla
En la actualidad la exposición ante la computadora en el ámbito laboral y el hogareño producen un cansancio intenso en los músculos oculares. Estas molestias, según detalló el profesional, “se pueden amenizar colocando lágrimas artificiales. Con la lubricación que brindan se logrará evitar la sintomatología de sequedad, enrojecimiento y otras molestias posibles”.
Sobre los recaudos a tomar ante el trabajo constante frente a la computadora, se recomienda evitar el brillo excesivo sobre la superficie en la que se está fijando la vista. Esto se puede controlar directamente en el monitor o colocando la computadora de manera que no tenga reflejos de frente. Si la luz procede del techo, bajando un poco el nivel del monitor puede ayudar a evitar los reflejos.
A su vez, es preferible que se utilice luz natural en lugar de artificial. En caso de que sea artificial, es recomendable que haya simultáneamente dos fuentes de luz: una ambiental y otra sobre la mesa de trabajo, para que no existan grandes contrastes entre lo que queda dentro y fuera del enfoque de la visión.
La distancia de la pantalla no debe ser menor de60 centímetrosy si se están consultando textos simultáneamente, es conveniente que no haya demasiada diferencia entre la distancia del texto y la pantalla.
Los usuarios que utilizan anteojos aéreos pueden tener una menor protección ante el reflejo del monitor si los anteojos son antirreflejantes, además de trabajar los textos con letras grandes y legibles, aunque en la versión final se cambien como lo requieran las presentaciones.
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