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“Esta noche no, querida”, tiene sus fundamentos

En algunas ocasiones, al iniciar las acciones conducentes a mantener una relación sexual o, peor aún, en el momento justo del orgasmo, aparece un inoportuno y severo dolor de cabeza que sorprende y atemoriza a la persona que lo padece. Se denomina, es obvio, “cefalea relacionada con la actividad sexual”.

Es una dolencia no muy frecuente, ya que según varias encuestas internacionales aparece en el uno por ciento de las personas en algún período de sus vidas, y predomina en hombres jóvenes, pero también puede fastidiar, en menor porcentaje, a adolescentes o a mujeres.

Sin embargo, no sólo aparece al mantener sexo con una pareja, también puede sorprender al que se masturba.

Héctor Zavala, secretario Institucional de la Federación Latinoamericana de Neurología y ex presidente de la Sociedad Neurológica Argentina, de la Asociación Argentina de Cefaleas y de la Federación Latinoamericana de Neurología, detalló que “esta cefalea ha dado lugar a muchas elucubraciones sobre posibles causas psicológicas, que han recorrido todas las teorías que van desde el pecado hasta el sentido subconsciente de culpa”.

Sin embargo, aclara, “es un tema médico a ser analizado con seriedad, pues aunque en general es benigno podría estar anunciando una alteración severa ya que el 5 por ciento de todas las personas son portadoras de una malformación vascular en su cerebro (aneurisma, y otros) lo que constituye una amenaza”.

“De hecho, algunos investigadores afirman que el 11 por ciento de las hemorragias cerebrales se producen durante el orgasmo”, detalló el neurólogo.

Además, el especialista comentó que las cefaleas relacionadas con la actividad sexual “pueden aparecer durante el jugueteo preliminar y entonces se denominan cefaleas preorgásmicas y no son tan ominosas”.

“Pero otras veces se manifiestan durante el orgasmo como «un rayo», son bruscas, severas, provocan mucho temor y hasta pueden alterar la consciencia, duran minutos o continúan por horas y pueden repetirse en las relaciones sexuales de los siguientes días”, remarcó el especialista.

Según el médico, estas “cefaleas orgásmicas” son más frecuentes en hombres de 25 a 45 años y “siempre deben ser estudiadas con imágenes (resonancia nuclear magnética de encéfalo con programa de angioresonancia de vasos encefálicos y del cuello), para descartar algún compromiso circulatorio cerebral, no sólo ruptura de aneurismas sino también estrechamiento de vasos cerebrales, que puede durar horas o días y ser reversible”.

“En los últimos años apareció otra causa provocadora de estas cefaleas: el sildenafil, una sustancia vasoactiva consumida para solucionar la disfunción eréctil, que puede provocar severa cefalea, especialmente si se tiene antecedentes de migrañas”, advirtió Zavala.

En lo que respecta al tratamiento, Zavala indicó que “en primer lugar hay que transmitir seguridad al afectado, aconsejar que emprenda esta actividad en circunstancias propicias y en un ambiente de tranquilidad y búsqueda de placer”.

“Desde el punto de vista farmacológico, parecería que la indometacina es el tratamiento más efectivo tanto en la crisis como en la prevención, como así también los triptanes”, concluyó.

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