La XXXI edición de la Fiesta de las Colectividades cerró ayer tras haber sido extendida para compensar los dos días que no pudo abrir por mal tiempo. Según la presidenta de la comisión, Lidia Del Grosso, la asistencia fue récord. En particular durante los días de semana. “Fue un mundo de gente. No tenemos un estimado porque nos falta un sistema para contarlo, pero claramente superamos lo ocurrido los años anteriores”, indicó a El Ciudadano. Según Del Grosso, la afluencia de público superó las expectativas de la organización, que reúne a colectividades de todo el mundo en Rosario. “Queremos destacar el clima familiar y ameno que hubo durante estos días. No tuvimos denuncias de violencia o robo dentro del predio. Sabemos que hubo algunos arrebatos en la salida pero no escapa a lo que pasa en la ciudad”, apuntó la organizadora.
Broche
Cerca de las 23 el cierre de la fiesta estuvo a cargo del grupo musical Amapola, que originalmente tenía programado su show para el jueves. En el stand argentino actuaron quienes debían hacerlo ese día. Ayer fue el turno de Nélida Argentina Zenón, Mario Reinoso, Nuestra Señora de Itatí, Santiaguito Ibarra y su conjunto, La Semilla Tarragosera, La Morocha del chamamé y Los Nuevos del Chamamé. Cabe recordar que las autoridades municipales y la comisión organizadora habían acordado extender la fiesta hasta ayer. La determinación se tomó tras las suspensiones de las jornadas de lunes y jueves de la semana pasada por cuestiones climáticas.
Coletazos del atentado
El domingo por la tarde en el stand de Siria se colocaron velas por los bombardeos realizados anteayer por Francia al país oriental. En la carpa del Club Argentino Sirio no hubo baile. Los grupos estables Haiat y Shams Suria realizaron una sobria presentación precedida por una ceremonia con velas, apoyados por representantes de las colectividades de Líbano y Palestina. En el escenario mayor, representantes de Siria subieron con la bandera del país durante el minuto de silencio y la invocación por la paz que programaron los organizadores.
En declaraciones radiales, el cónsul de Siria en la ciudad, Jorge Fanos Abdelmalek. opinó: “Toda mi colectividad, todas las instituciones católicas y no católicas estamos totalmente consternados por lo que sucedido en París”, señaló. Y agregó: “Todos los países del mundo debieron haber tomado una determinación anteriormente para poder eliminar estos grupos terroristas, que no son grupos terroristas porque esa palabra les queda muy pequeña a estos elementos que no tienen contemplación de nadie y actúan de la manera que lo están haciendo”.
Por la paz y la Justicia
Al cierre de esta edición estaba previsto que distintas colectividades cancelaran sus bailes programados y, en cambio, subieran a los escenarios particulares y el principal con velas prendidas como homenaje a las víctimas de los antentados ocurridos en Francia y el bombardeo a Siria. Estaba previsto, según representantes de las colectividades árabes, marchar por el predio en silencio. También se esperaba un discurso con eje en la paz y la justicia para los pueblos, aunque no precisaron dónde lo iban a realizar.
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