Ciudad

Celeste y blanco

Un homenaje a la Bandera con la argentinidad al palo

Miles de personas de distintos puntos del país llegaron al Monumento para rendirle honor a la enseña patria. El gabinete en pleno acompañó a Cristina en el escenario que compartió con el gobernador Bonfatti y la intendenta Fein.


La ciudad lució ayer sus colores más vivos. En el marco de los festejos por el Día de la Bandera, miles de personas de diversos puntos del país se acercaron desde temprano al Monumento para disfrutar en familia del agradable día al aire libre como excusa para atentar contra el estómago con esas pesadas, sabrosas e irresistibles comidas típicas que hacen posible hablar bien de cosas tan vulgares como el aceite y la grasa.

La actividad principal tuvo lugar en el parque Nacional a la Bandera, donde se montó un inmenso escenario que albergó la actividad protocolar. Una vez concluida, se pronunciaron los discursos de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, el gobernador Antonio Bonfatti y la intendenta Mónica Fein. Frente a la estructura de hierro, militantes de todos los sectores políticos se agolparon con banderas, prácticamente obligando a los asistentes a observar el acto por las dos pantallas de LED situadas a los costados.

Cada uno celebraba a su manera. Algunos tendieron su manta de picnic en las cercanías de la fuente situada frente al edificio patriótico, lugar en el que la música, que de a momentos se fundía en una especie de electrónica criolla con las cornetas, silbatos y bombos que sonaban de fondo, servía de perfecto complemento para rellenar los vacíos entre conversaciones. Otros se inclinaron por un plan más tranquilo que implicaba rondas de mate, siestas y lectura bajo el sol en la zona de los galpones.

En eventos de masiva concurrencia resulta curioso el ingenio de los vendedores callejeros para generar oportunidades de negocios, algunos de ellos que realmente cuesta creer que sean rentables. En una carpa se comercializaban portarretratos con la figura de la primera mandataria, Juan Domingo Perón y otras figuras identificadas con idéntica ideología política. A unos metros de allí, se exhibían remeras con la cara de personajes reconocidos del pasado. “La de Evita se vende como si saliera con fritas”, retrató el vendedor. Pero, sin lugar a dudas, el que mayor ganancia generó fue el pochoclero que, como servicio extra, calentaba agua para llenar termos en una vieja pava de acero por el módico valor de cinco pesos.

Los más pequeños también aportaron color a la fiesta con unas simpáticas mariposas de papel unidas a un taco de madera a través de un grueso y extenso alambre. No obstante, también pudieron verse abuelos jugueteando con estos insectos de fantasía con una sonrisa en su semblante que los hacía rejuvenecer 60 años. Del otro lado sus nietos los miraban con indiferencia, poniéndose en el rol de adultos. Sin embargo, la atracción que acaparó la atención de los jóvenes fue la exposición de tanques y vehículos de guerra del Ministerio de Defensa de la Nación (ver página 7). El estupor que se clavaba en sus miradas mientras observaban con boca entreabierta el imponente camión Lanzador Múltiple de Cohetes CP-30 transmitía más sensaciones que una película de drama oriental.

El patriotismo emergía en cada rincón. Buena parte de las banderas que se encontraban dispersas se agruparon frente al escenario cuando llegó el momento de los discursos. En tanto, aquellos no interesados en los discursos prefirieron mantenerse al margen y seguir disfrutando de las comidas que se ofrecían. “Empieza el acto”, le advirtió una mujer a un individuo robusto que aparentaba ser su pareja, quien yacía recostado en una reposera con un trozo de pan en una mano y un plato con abundante chorizo colorado en la otra, como simbólicamente agitando una bandera en honor a los padres de la Nación. “Andá vos, dejame comer tranquilo”, lanzó con menosprecio. Detrás suyo, iluminada por el radiante sol, podía leerse sobre una de las paredes del Monumento la frase: “Este será el color de la nueva divisa con que marcharán al combate los defensores de la patria”.

Comentarios