Personal de Tránsito realizó varias intervenciones este lunes a la noche y en dos hechos previamente alertados a la Central 911, interceptaron a los conductores de un automóvil al que le faltaban algunas de las cubiertas y que al hacerle el test de alcoholemia se le detectó 2.08 gramos de alcohol en sangre. En el otro caso la medición fue más alta y arrojó más de 3 gramos de alcohol en sangre. Fue en un hombre que manejaba una moto y necesitaba de muletas para movilizarse.
En el caso del conductor de la moto, desde la Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana dijeron que “es lo máximo que puede detectar el test”
El saldo de los operativos que llevó a cabo la Dirección General de Tránsito entre la noche del lunes y este martes a la madrugada, derivó en la remisión de 14 vehículos: 13 motos y un auto.
Sin cubiertas y alcoholizado
El conductor del automóvil a quien se le detectó poco más de 2 gramos de alcohol en sangre, circulaba por Santa Fe, entre Francia y Vera Mújica. Fue advertido movilizándose sin algunas de sus cubiertas lo que comúnmente se conoce como “en llanta”, por lo que personal policial convocó a los inspectores municipales que constataron que quien iba al mando del rodado estaba alcoholizado, con un dosaje de 2,08 gramos. El vehículo fue retirado al corralón municipal.
El segundo de los casos tuvo lugar en Riccheri y Perón, dónde el conductor de una moto con carro es detenido por realizar maniobras peligrosas. Personal de Tránsito le hizo el test de alcohol que llegó al máximo posible: más de 3 gramos de alcohol en sangre.
Los inspectores tuvieron que ayudar a trasladarse al hombre que necesitaba de una muleta para poder caminar. El rodado fue trasladado al corralón y las sanciones serán correspondientes a la decisión del Tribunal Municipal de Faltas.
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