Los conductores de trenes de las líneas Mitre, Sarmiento, San Martín, Roca y Belgrano Sur, en Buenos Aires y el conurbano, realizaron ayer un sorpresivo paro de tareas dispuesto a partir de mediodía por La Fraternidad, el sindicato que los agrupa, en una medida de fuerza que dejó a pie a miles de pasajeros y derivó en graves desmanes en la estación Constitución.
Los usuarios se mostraron molestos por el imprevisto paro y tuvieron que recurrir a otras alternativas de transporte, mientras que el ministro del Interior y Transportes, Florencio Randazzo, reveló que la medida de fuerza obedece al rechazo por parte del sindicato de la colocación de cámaras de videovigilancia en las cabinas de conducción de los trenes para supervisar el desempeño de los motormen y advertirles de problemas en las vías por donde conducen las formaciones o errores de manejo que pueden provocar accidentes como el de Castelar y el de la estación de Once.
El gobierno salió así al cruce de las versiones que apuntaban a que la medida de fuerza se realizaba por un atraso en el pago de los aguinaldos.
Randazzo aseguró que el paro “es consecuencia de la instalación de cámaras en las cabinas de conducción”, ya que “el aguinaldo se paga mañana (por hoy), cuarto día hábil del mes, como sucede desde hace ocho años”.
En ese sentido, el funcionario precisó: “Mañana (por hoy) los ferroviarios cobran su salario y aguinaldo con 23 por ciento de aumento, retroactivo a marzo, más 90 pesos por día trabajado en concepto de viáticos”.
“La verdad es que se oponen a la instalación de cámaras en la cabina de los conductores, porque no quieren que haya medidas de control que apuntan a mejorar la seguridad del servicio”, añadió Randazzo, y agregó: “Es inexplicable que se opongan a la instalación de cámaras. Quien no tiene nada que ocultar no tiene por qué oponerse a una medida de este tipo”.
“La idea es que se utilice este tipo de tecnología para que frente a un inconveniente no quede ningún tipo de dudas respecto de cómo opera cada actor del sistema”, añadió el titular de la cartera de Transporte.
Desmanes en Constitución
Graves desmanes ocurrieron ayer en la estación Constitución, cabecera del ferrocarril Roca, a raíz del paro dispuesto por los afiliados a La Fraternidad, el sindicato de los conductores de trenes.
Al caer la tarde, personas que aguardaban para volver a sus hogares y se veían impedidas de hacerlo por el medio acostumbrado apedrearon las instalaciones de la estación y prendieron fuego a los quioscos allí instalados, generando incidentes que dejaron graves destrozos en el lugar.
En cuanto al paro que paralizó el servicio, el delegado gremial de la línea de trenes Sarmiento, Rubén “Pollo” Sobrero, cuestionó a la conducción de La Fraternidad al señalar que no son “claros” los motivos por los que se tomó la medida de fuerza.
“Cuando se toman medidas de fuerza tiene que estar claro el motivo”, sostuvo el gremialista, que no quiso ahondar más al respecto.
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