Hay preocupación entre los industriales de la provincia por el avance de los productos importados. Ayer se presentó en Santa Fe el segundo informe del Observatorio de Importaciones, elaborado en forma conjunta por el gobierno provincial y la Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe). En la presentación, el ministro de la Producción, Luis Contigiani, alertó sobre las importaciones “que no vienen a integrarse al entramado productivo, sino de bienes importados que destruyen nuestro sistema productivo”.
Dos semanas después del primer informe, presentado en Rosario, ayer los ministros de Gobierno Pablo Farías y de la Producción dieron nuevos detalles sobre el impacto de las importaciones en Santa Fe, junto a dirigentes de la Fisfe.
Donde más se siente la liberación de las trabas aduaneras es en la producción de heladeras, licuadoras, campanas de freno, calzados, colchones, motos y hasta golosinas.
El Observatorio analizó 200 posiciones arancelarias, 22 más de las que se especificaban en el primer informe. “Esto da cuenta de una ampliación de las importaciones en productos y en números”, explicó Contigiani. “El análisis de los datos nos marca una situación muy preocupante. Estamos analizando importaciones que no vienen a integrarse al entramado productivo para que el país siga avanzado en la búsqueda de la sustitución de importaciones, sino que hablamos de la entrada de bienes importados que destruyen nuestro sistema productivo”, agregó.
El ministro de la Producción lanzó un reclamo directo a la Nación: “Estas acciones se emprenden con la expectativa de que el gobierno nacional pueda asumir esta problemática, frenar este tipo de importaciones y desarrollar políticas más exhaustivas y técnicas en términos de manejo del comercio exterior”.
Por su parte, el titular de la Fisfe, Guillermo Moretti, adelantó que se hará “un seguimiento de la situación” y aclaró: “En ningún momento planteamos parar las importaciones; lo que alertamos es que no se puede regalar el mercado interno con productos terminados. Lo que hay que importar es lo que necesitamos para producir y después volver a exportar”.
Números que preocupan
Entre las producciones más afectadas en la provincia, se encuentran las heladeras (las importaciones subieron un 358 por ciento entre junio de 2015 y junio de 2016) y las exhibidoras (subieron un 389 por ciento en promedio anual).
Brasil, Polonia, Turquía, China y México son los países de origen. El ingreso de estos productos impacta de lleno en Rosario y Villa Gobernador Gálvez, donde se concentra el 82 por ciento de la producción nacional de línea blanca. En el primer semestre de 2015, entraron al país 16.880 heladeras; en el mismo período de 2016, ingresaron 60.465.
Similar panorama se observa en el rubro licuadoras: ingresaron desde China 66.168 unidades en la primera mitad de 2015 contra 149.794 unidades en el primer semestre de este año. La suba de las importaciones de este producto fue del 226 por ciento interanual y afecta principalmente a las fábricas de Granadero Baigorria.
Sin embargo, el rubro más afectado es la fabricación de campanas de freno. En todo 2015 ingresaron al país 2.100 unidades; en el primer semestre de 2016, fueron 39 mil unidades. En promedio anual, el aumento fue del 3.714 por ciento.
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