El ministro de Salud de la provincia, Miguel Ángel Cappiello, acompañado por el consultor de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Celso Rodríguez, puso en marcha un taller de complementariedad para establecer criterios de cooperación mediante los cuales la Agencia Santafesina de Seguridad Alimentaria (Assal) prestará asesoramiento para la creación de un organismo similar, la futura Agencia de Alimentos de Buenos Aires. Así las cosas, nueve funcionarios de la cartera de Salud de esa provincia serán capacitados en la capital provincial para poder llevar el modelo desarrollado en territorio santafesino. Ambas agencias se convertirán en las primeras de su tipo en involucrar sus trabajos de manera integrada en América.
Del encuentro participaron también el secretario de la Assal, Marcos Monteverde; la subdirectora de Control Sanitario, Silvia Caballero, y el director de Fiscalización, Walter García, ambos del ministerio de Salud bonaerense e integrantes de los equipos técnicos que los acompañarán, así como el director de la Assal, Raúl Samitier, junto a otros responsables del organismo.
A su turno, el consultor de la OPS dijo que ese organismo internacional va a cooperar técnicamente ante el pedido del gobierno provincial. “La idea es llevar adelante este modelo de agencia única que representa la Assal, con gran influencia hoy en la salud pública. Es sumamente importante contar con un sistema que controla, fiscaliza, capacita, monitorea y realiza vigilancia, lo que le permite a la población estar segura de los alimentos que consume”, destacó.
Además, Rodríguez remarcó que “todas las acciones están focalizadas en el cumplimiento de buenas prácticas”. “Esto es, mediante el control y fiscalización del lugar donde se elabora el alimento, sea en un municipio o comuna. También hay que rescatar la participación de la comunidad, gobiernos municipales, sectores privados y ONGs en articulación con otros sectores del propio gobierno. Hoy la población puede saber si un alimento está habilitado por la Assal verificando su número del registro vía internet en la página web del organismo”, comentó.
“Del mismo modo, se puede constatar si un vehículo de transporte de alimentos está habilitado, ya que con el número de la patente se puede determinar fehacientemente si cumple con las condiciones sanitarias exigidas”, agregó.
“Desde la OPS estamos multiplicando en el país la posibilidad de que nuevas agencias de este tipo se vayan creando y es nuestra obligación, además, hacer lo propio en todos los países de América y del mundo. Es importante recordar que la Assal obtuvo la certificación ISO 9001. Es por eso que nosotros estamos llevando adelante un proceso de divulgación de la experiencia de Santa Fe, convertida en modelo a exportar para todo el mundo”, señaló Rodríguez.
Más adelante, las autoridades de la Assal, junto con los responsables de los cinco pilares que la conforman (Auditoría, Capacitación/Epidemiología, Administración, Laboratorio y Legislación), explicaron la dinámica de esta red de trabajo en cada uno de sus departamentos y cómo se logró alcanzar un eficiente sistema de gestión, moderno y transparente, en materia alimentaria.
Por su parte, Monteverde indicó que desde el organismo “se defiende y se trabaja con el objetivo de una conceptualización más inclusiva de la salud”. “Entendemos los procesos de salud-enfermedad desde el enfoque de los factores sociales y estableciendo como meta el logro de la equidad en salud y su defensa como un derecho de la ciudadanía. Lo que buscamos es lograr que se produzcan alimentos seguros, saludables, nutritivos y culturalmente aceptables, necesarios para que el individuo pueda llevar una vida sana y activa que le permita gozar del nivel más pleno de salud”, explicó.
A su vez, García, del Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires, dijo que se procura “recoger la experiencia realizada en Santa Fe”. “Nuestra idea apunta a profundizar en la dinámica y funcionamiento de la Assal y exportar sus bases políticas y técnicas”, concluyó.
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