Edición Impresa

Zona sur

Saga violenta: tres muertos y 10 heridos

Saldo del enfrentamiento entre bandos en Grandoli al 5000 en 70 días. Otros dos jóvenes fueron baleados ayer; esta vez en Rosas al 4100.


Dos nuevos heridos de bala cerraron esta semana la saga de enfrentamientos entre dos clanes de zona sur: Caminos versus Funes. El fuego cruzado comenzó a intensificarse el lunes pasado, cuando una balacera dejó un muerto y un herido, y siguió el miércoles con un nuevo joven baleado. La batalla por el territorio entre ambas facciones dejó tres muertos y diez heridos en 70 días.

Según fuentes policiales, ayer a las 14, Franco L., de 18 años, recibió un impacto de bala en la zona lumbar en Juan Manuel de Rosas al 4100. El joven llegó a la guardia del hospital Roque Sáenz Peña, fue operado luego en el Heca y quedó estable. Pasaron veinte minutos y entró desde el mismo lugar Ulises F., de 22, con un tiro en el muslo posterior izquierdo. El muchacho está internado fuera de peligro, también en el Heca. Las víctimas declinaron manifestar en qué circunstancias terminaron heridos, dijeron fuentes policiales.

Según investigadores policiales y judiciales, Ulises es uno de los integrantes de un clan enfrentado con la familia del asesinado ex líder de la barra de Newell’s Roberto “Pimpi” Caminos: los primeros asentados en Tablada y aliados con muchachos del Fonavi del Parque del Mercado, y los segundos afincados en el lindero barrio Municipal. Por eso no tardaron en vincular los tiros de ayer con recientes sucesos.

El lunes pasado a las 22.30, cuatro muchachos armados con ametralladoras atacaron a otros jóvenes en Lamadrid y General Paz (barrio Municipal). Tras la balacera, Leonel Sánchez, de 25 años y señalado como mano derecha de un hijo de Pimpi, murió y Héctor C., de 22, quedó internado grave. Ese día, vecinos aseguraron que “tiró gente de Tablada”. A las 36 horas se produjo el contraataque. El miércoles a las 9 un desconocido se asomó a la puerta de un comercio de Lamadrid al 92 bis y preguntó por Andrés G. El muchacho de 24 años se asomó. El pistolero abrió fuego y uno de los proyectiles le impactó en la zona lumbar y salió por el tórax. El atacante huyó y la víctima quedó internada grave en el Heca. Vecinos dijeron que el muchacho fue sindicado como el satélite que la noche del lunes dio la posición del grupo del Municipal a sus enemigos de Tablada.

Sin embargo, en muchos de los ataques, los familiares de las víctimas dejaron en claro que los disparos tanto de un lado como del otro no hacen blanco en los responsables, sino que cualquier vecino que quede en el medio puede terminar con un tiro o muerto.

La saga

El 3 de marzo pasado la Justicia federal desarticuló una banda que administraba seis búnkers en zona sur. En el operativo detuvieron a Rosa Caminos, hermana de Pimpi, y a gran parte de su familia.  Ocho días más tarde, Mariela Miranda fue herida de muerte en Uriburu y Ayacucho. Los autores fueron dos motociclistas. La mujer, esposa del sindicado jefe del clan Funes, murió en el Roque Sáenz Peña y los rumores no tardaron en apuntar al barrio Municipal.

El 13 de marzo apareció la respuesta: un chico de 22 años fue baleado en Sánchez de Thompson y Lorenzini. Como la balacera ocurrió a una cuadra de la escuela Kennedy, que funciona sobre Grandoli, el lunes siguiente la dirección decidió que los chicos no salieran al patio durante el recreo.

El 1° de abril, Ariel A., de 21 años y conocido como Teletubi (sindicado líder de la banda del Fonavi del Parque del Mercado) fue apresado en la zona de Isola al 100 bis. La Fiscalía lo acusó como el responsable de balear en la pierna a otro joven tres días antes en Grandoli al 5000, y quedó preso.

El 11 de abril se produjo otro tiroteo en la misma cuadra. En ese lugar, Jonathan L., un muchacho de 27 años, terminó internado en grave estado como consecuencia de un tiro en la cabeza: todos apuntaron a la “gente de Tablada”.

Cuatro días después, dos hombres del clan Funes fueron sindicados por testigos como los autores del ataque a tiros en las piernas que sufrió Nahuel, un adolescente de 14 años, cuando tomaba una gaseosa en Alice al 5100 (barrio Municipal).

El Día del Trabajador, Eugenio “Pupi” Solaro fue asesinado cuando un encapuchado descargó una lluvia de balas en un pasillo de Ayacucho y Ameghino. Como consecuencia de los disparos, un nene de 11 años y un muchacho de 18 también terminaron heridos por los proyectiles y quedaron en grave estado. Por esta balacera fue demorado Ulises F., el muchacho baleado en el muslo ayer, pero fue liberado por falta de pruebas ya que, según testigos, no fue el autor de los disparos.

Comentarios