Los maestros privados nucleados en el Sindicato Argentino de Docentes Particulares (Sadop), como habían hecho sus colegas de Amsafé, también aceptaron la propuesta salarial del gobierno provincial. Pero advirtieron a los padres que envían a sus hijos a colegios privados que el incremento –que promedia el 25 por ciento– se trasladará a las cuotas que pagan todos los meses.
Sadop reunió a sus delegados anteayer en Santa Fe y ayer en Rosario. En ambos encuentros, resolvieron aceptar el aumento salarial y dejaron de lado cualquier tipo de medidas de fuerza.
“La respuesta fue contundente: 80 por ciento de los delegados se expresaron por aceptar y un 20 por ciento por rechazar”, explicó ayer el secretario general del sindicato, Pedro Bayúgar.
En Rosario el resultado fue algo menos holgado: el 75 por ciento aceptó la propuesta y el 25 por ciento la rechazó.
Según Bayúgar, los maestros de establecimientos privados consideraron que no es momento para seguir con las medidas de fuerza.
“Iba a ser muy negativo para el proceso pedagógico continuar con los paros”, indicó el dirigente gremial.
Las condiciones
Si bien terminaron aceptando la propuesta salarial, los delegados de Sadop pusieron una serie de reparos “en cuanto a los montos del aumento, el escalonamiento de los pagos y las sumas fijas que no se trasladan a los jubilados”.
Además, pidieron volver a evaluar en paritarias el poder adquisitivo del salario docente en julio o agosto.
La decisión de los maestros privados se suma a las que ya habían tomado, en la semana, sus pares de Amsafé, los trabajadores estatales agremiados en ATE y UPCN y los municipales. La única negociación que permanece abierta es la de los médicos.
¿Quién paga?
Con cada acuerdo salarial, el Ministerio de Educación modifica los topes de las cuotas que cobran los colegios privados. “Lamentablemente, siempre sucede lo mismo: nos mejoran el salario y enseguida aumentan las cuotas de los colegios”, se quejó el líder de Sadop, quien presume que el aumento de los salarios se trasladará a las cuotas.
“El 80 por ciento de los establecimientos privados cobran el 100 por ciento del subsidio del Estado, por lo que no deberían producir un incremento en los costos. El colegio que cobra el 80 por ciento del aporte estatal para sus cargos docentes debería tener que producir aumentos proporcionales, es decir, un 20 por ciento de incremento, no más de 150 pesos por docente”, añadió Bayúgar.
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