Gerardo Martino siempre tiene una mirada distinta a la prensa. Se puede coincidir o no, pero el Tata continuamente busca sacarle un poco de drama al fútbol, y si bien sabe que ante River la Lepra afronta un partido importante desde lo anímico, de ninguna manera admite que se trate de un “partido decisivo”.
—¿Imaginás que el partido ante River será clave en las pretensiones por el título?
—No se define nada, es muy temprano para todo, para los de arriba y para los de abajo. Aunque si fuera por cómo se vive acá en Argentina, debería decir que sí. Desde el año pasado estamos hablando del descenso y en la primera fecha ponemos quienes van punteros, cuando puede haber diez equipos.
—De todas maneras no es un partido más…
—Es un partido importante ante un rival que tiene argumentos para no descuidarse. Lo que miramos los entrenadores y los jugadores es si el nivel de juego da para crearse expectativas de pelear el campeonato, o para saber en qué lugar del torneo puede terminar. Pero respecto a la importancia o decisión de un partido, todavía no la tiene.
—¿Cómo están físicamente?
—Esperemos que bien. Si bien el desgaste con Universidad de Chile fue importante, no deberíamos tener problemas para correr y jugar el partido con River.
—Tras diez partidos en menos de cuarenta días el receso por Eliminatorias llega justo.
—Viene bien, aunque no noto un deterioro físico en el equipo. La verdad es que en el último partido evidentemente no lo demostró, pero sí creo que hay un deterioro mental, una necesidad de no venir a Bella Vista un día, de no ponerte los botines o las zapatillas un día, de hacer lo que tenés ganas de hacer. Eso también cuenta.
—¿Cómo lo viste a Cruzado?
—Lo vamos viendo mejor, con más ritmo. No digo que nos ha sorprendido porque pensamos que estaba en buenas condiciones para estar con Estudiantes y volver a hacerlo contra la U, que fue un partido muy intenso. Pero hacía mucho tiempo que no jugaba dos partidos seguidos en tan poca cantidad de días. Ha respondido bien, así que veremos cómo evoluciona y se recupera después del trajín de estos dos partidos.
—¿Quedaste conforme con este tramo donde se acomodaron en el torneo y la Copa?
—Tenemos por costumbre tratar de hacer autocrítica del triunfo y de la derrota. Sabemos que no jugamos un buen primer tiempo con Estudiantes, y a pesar de ganar el partido no dejamos de mencionarlo entre nosotros y de decir en donde nos equivocamos y porqué hicimos las cosas mal. Me satisface lo que hicimos en los dos últimos partidos.
—Frente a Universidad además hubo una muestra de carácter importante.
—Me deja muy satisfecho lo hecho con Universidad de Chile porque a veces cuando no se puede desplegar todo el fútbol que podemos tener, también la templanza, la lucha, la valentía ayuda a ganar esos partidos. Entiendo que no se ganan campeonatos así, pero te permite a veces lograr triunfos que motivan mucho.
—Tras el triunfo del martes dijiste que debían pelear los tres frentes, ¿se puede?
—Si hay un grupo de jugadores que soportó una mala época, que la dio vuelta y revirtió la situación, y ellos solos se ganaron esta posibilidad, es lógico que lo hagan teniendo la mayor de las aspiraciones. Después no sabemos hasta donde podemos llegar, pero hay que intentarlo.
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