Un vecino de la zona noroeste fue víctima este viernes al mediodía de una particular salidera bancaria cuando extrajo un millón de pesos de una sucursal bancaria de avenida Eva Perón al 8000, lo guardó en una mochila en el baúl de su auto y cuando fue a hacer un trámite a otra entidad financiera de Mendoza al 6000, ladrones rompieron el vidrio de la ventanilla trasera para luego sacarle el dinero.
Las salideras bancarias fue un tema que estuvo en las crónicas policiales desde el martes último luego del asesinato a sangre fría del inspector de Inteligencia, César Carmona, cuando llegaba a su trabajo en la sede de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de Lamadrid al 500. Precisamente una de las hipótesis sobre el móvil del crimen es que a la víctima, los homicidas –los cuales están identificados y son buscados por la Justicia– la siguieron de su otro trabajo en una financiera céntrica y le dispararon al menos 13 veces para robarle una mochila, ya que se cree que dedujeron que tenía efectivo.
Último adiós al policía asesinado frente a la sede de la AIC
Veteranos investigadores contaron en los últimos meses las salideras se acrecentaron en la city rosarina y que la mayoría de los blancos de los asaltantes –los trascendidos señalan a bandas oriundas de Tucumán– son las personas que hacen transacciones o que son los portavalores en las financieras debido a que, como el dinero algunas veces no está registrado, mueven sumas más grandes que en un banco y también no dejan asentadas las denuncias pero el golpe se sabe en ese ambiente. Sin embargo, nadie está a salvo y como muestra está el robo que sufrió este viernes el cliente del banco Macro.
De acuerdo con voceros policiales, la víctima de nombre Luis, de 58 años, contó a los investigadores que alrededor de las 11 cuando sacó un millón de pesos de la sucursal del Macro de Eva Perón al 8000. Como tenía que ir a otra entidad financiera, guardó la mochila con el dinero en el baúl de su Peugeot 208. Condujo unos minutos y estacionó en la cuadra de la otra sede del Macro de Mendoza al 6000, entre las vías del ferrocarril y Barra.
La víctima salió pasado el mediodía y cuando llegó a su vehículo advirtió que le habían estallado el vidrio de la ventanilla trasera del lado derecho para sacarle la mochila con el dinero que estaba en el baúl.
Las primeras actuaciones fueron llevadas a cabo por el personal de la comisaría 14ª y la investigación está a cargo del fiscal en turno de la Unidad de Flagrancia.
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