Hasta Manuel Belgrano estuvo presente en los festejos por el Bicentenario de la Bandera, cuyo acto central se realizó esta tarde en el Parque Nacional a la Bandera, frente al Monumento Nacional. Un actor se puso en la piel del prócer y tras recrear la “Ruta apasionada”, llegó desde el sur de la ciudad al lugar donde se izó por primera vez la insignia patria y dio un emocionante discurso en el que pidió a todos los presentes que “si aman y respetan esta bandera expresen un sentido: sí, juro”. Así fue como los miles de argentinos que se concentraron frente al escenario, emplazado en la costa del Paraná, alzaron su voz en un emotivo juramento conjunto. Belgrano entregó la bandera a la presidenta, quien la agitó mientras comenzaba a sonar la Marcha a Mi Bandera en la voz y música de Juan Carlos Baglietto y Lito Vitale, quienes ya se habían encargado de entonar las estrofas del himno.
Nadie quiso perderse la celebración de los 200 años de la creación de la bandera. En las horas previas al comienzo del acto oficial, llegaban micros repletos desde distintas provincias de la Argentina. Familias, grupos de jóvenes, estudiantes y militantes de toda una vida llevaban sus banderas o escarapelas argentinas para participar de un momento único. Sin embargo, para el enojo de algunos rosarinos, la audiencia también estuvo teñida de mucho color partidario, expresado en pancartas, banderas y cánticos kirchneristas.
“Alta en el cielo”, la bandera más larga del mundo, también tuvo un lugar preferencial en el acto. Dividida en cuatro extensos retazos, llegó desde cada punto cardinal de la ciudad hacia el escenario. Los rosarinos se concentraron en el Parque España (norte), en el Parque Irigoyen (sur), en la Plaza Pringles (oeste) y en las islas frente al Paraná (este). Este último grupo, estuvo acompañado por el promotor del proyecto ‘Alta en el cielo’, Julio Vacaflor, y conformado por pescadores y habitantes de las islas. Los mismos, desplegaron la bandera en varias canoas y tras cantar el himno nacional se dispusieron a cruzar el río y hacer confluir la insignia con el resto de los retazos.
Entre los tantos invitados a la importante ocasión se destaca con creces la presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner. Sin dudas, era la voz que todos querían escuchar. Tras los discursos de la intendenta Mónica Fein y el gobernador Antonio Bonfatti, la presidenta hizo uso de la palabra. Entre aplausos, banderas y cantitos, que acompañó desde el micrófono, Cristina recordó a Belgrano como “su preferido”, ya que sin él y las batallas que libró en Salta y Tucumán “hubiese sido imposible la independencia”. Además, destacó que la decisión más importante que Belgrano tomó fue la de “luchar por la patria y la libertad”.
Hubo algunos trascendidos respecto al enojo de los ex combatientes de Malvinas, quienes habrían quedado fuera de protocolo al intentar entregarle un presente a la primera mandataria. El gobernador Bonfatti fue el primero en referirse al tema de la soberanía sobre las islas con la frase: “Las Malvinas son argentinas”. Luego lo siguió Cristina, extendiéndose en el tema. Todo el palco oficial se puso de pie para honrar a los ex combatientes de Malvinas y a los jóvenes que perdieron la vida en las islas.
En la Cuna de la Bandera, este lunes 27 de febrero de 2012, la más significativa insignia patria tuvo su homenaje. La celebración estuvo en cada uno de los rosarinos y argentinos que se hicieron presentes en el Monumento, frente a las costas del Paraná, donde hace 200 años Manuel Belgrano enarboló la bandera nacional por primera vez. Más allá de los colores políticos, de las edades y los lugares de procedencia, este festejo patrio unió a un país y recordó los ideales de libertad y revolución que llevaron al prócer a ese lugar en 1812.
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