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Robaron escopetas y pistolas de armería

En un minuto y medio robaron una veitena de escopetas y pistolas del local de 27 de febrero y Paraguay en plena nadrugada. La alarma sonó, pero la Policía tardó 20 minutos. Similar golpe dieron en Santa Fe semanas atrás.


Un minuto y treinta segundos. Eso fue lo que tardó un grupo de escruchantes en violentar la puerta de una armería ubicada en bulevar 27 de Febrero y Paraguay, sacar unas 20 armas de fuego y darse a la fuga sin dejar rastros. El golpe fue perpetrado pasadas las 4 de ayer en jurisdicción de la seccional 5ª. El dueño de la firma llegó antes que la Policía, que tardó 20 minutos en presentarse en el lugar, pese a que por tratarse de un negocio de venta de armas tiene un sistema de monitoreo especial.

La rapidez con la que actuaron los ladrones fue inversamente proporcional a la de los policías. Así se desprende de los informes del sistema de alarmas que dio a conocer el dueño de negocio, Ricardo B., de 54 años.

El hombre explicó que por tratarse de un negocio que vende armas de guerra, el sistema de alarma está conectado a la central policial, que fue la primera en recibir el alerta. Según sus dichos, a las 4.16, luego de dar aviso a la Policía, la empresa de seguridad lo llamó para avisarle que se había activado la alarma de su negocio. El hombre dijo que se levantó de la cama, se vistió, sacó el auto de la cochera y condujo unas 20 cuadras, y que cuando llegó a su negocio (a las 4.34) todavía no había policías.

Allí se encontró con las puertas de su negocio abiertas y vidrios en el piso y al ingresar volvió a activarse la alarma. Fue entonces que Ricardo recibió un segundo llamado de la empresa de seguridad, a quien le dijo que la alarma se activó en esta segunda oportunidad porque quien estaba era el propio dueño y que estaba confirmando en el lugar que la primera alerta se disparó porque habían ingresado a robar. Recién algunos minutos después llegó un móvil del Comando Radioeléctrico.

La demora de los uniformados llamó la atención del dueño de la firma, quien esgrimió que pese a que es la primera vez en 12 años que le roban varias veces se activó la alarma y siempre la presencia policial fue inmediata.

Otro dato que surgió de los dichos de la víctima es que los ladrones actuaron con mucha rapidez, a oscuras, y fueron directamente a una habitación trasera donde se encuentra la sala de exposición de armas, ubicadas en muebles de madera cerrados y con vidrios en su parte superior.

En ese sentido, el dueño de la firma especuló que a su local entraron al menos tres personas, ya que mientras una rompía los cristales la otra sacaba las armas, y una tercera, quizás, se encargaba de iluminar.

De acuerdo con los primeros cálculos de Ricardo, del local se llevaron alrededor de 20 armas, entre pistolas calibre 9 milímetros, 11.25, 38 y escopetas. El hombre agregó que no le faltó dinero ni municiones.

Una persona allegada a la víctima especuló: “Sabían bien dónde estaban las armas. Esto fue una batida”.

Voceros policiales informaron que hasta el momento no hay sospechosos, como tampoco testigos que hayan observado en qué vehículo se desplazaban los ladrones o cuántos eran.

Uno de los pesquisas dijo que se peritarán las cámaras de seguridad de las dos esquinas del negocio, una perteneciente al banco Credicoop, ubicado en Paraguay y 27 de Febrero, y la otra en la estación de servicios de calle Corrientes y 27 de Febrero.

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