La Central Termoeléctrica a Carbón de Río Turbio, en Santa Cruz, concretó ayer con éxito su prueba inicial de sincronización a la red nacional, lo que permitió entregar por primera vez electricidad al Sistema Interconectado Nacional (SIN), informó el Ministerio de Planificación Federal.
La sincronización comenzó a las 8.30 de ayer y se extendió por una hora, en la que se generaron 22 megavatios utilizando, como establecen los procedimientos para este tipo de pruebas, una combinación de carbón y gasoil.
De acuerdo al informe de la prueba, que contó con la participación de la empresa Siemmens, proveedora de las turbinas que equipan la central, se evaluó satisfactoriamente el funcionamiento de la turbina a baja velocidad, a sobrevelocidad y sobreexcitación.
El Ministerio de Planificación Federal calificó como “un hito histórico” la puesta en marcha de la central termoeléctrica, usina impulsada por el ex presidente Néstor Kirchner, que hace posible la industrialización del carbón de Río Turbio y su inclusión en la matriz energética nacional.
La central de generación eléctrica fue construida con tecnología avanzada de lecho fluido junto al único yacimiento de carbón de Argentina, un proyecto que se ejecutó bajo la modalidad “llave en mano” con una capacidad de 240 MW.
Se trata de la central térmica de carbón más austral del mundo y su obra ha sido diseñada con el máximo respeto por el medio ambiente ya que su tecnología CFB garantiza bajos niveles de emisiones y el equilibrio natural de la zona.
La central se nutrirá exclusivamente con el carbón producido en la mina de Río Turbio y para la refrigeración se utilizarán aerocondensadores que preservan el equilibrio hídrico, aunque también está adaptada para funcionar a gas.
Esta nueva central forma parte del Plan Energético Nacional anunciado en 2004 que permitió terminar otros proyectos estratégicos que se encontraban paralizados, como la Central Nuclear Néstor Kirchner (Atucha II) y la Represa Binacional Yacyretá.