El Hincha

Primer mandamiento: ganar

Fue parecido al de siempre, pero ganó. Y eso es fundamental, ahora debe mejorar en el juego.

No había lugar para especulaciones, en el debut de Rivoira Central debía ganarle a Instituto. Y lo consiguió. Eso es lo que realmente importa, y acá habría que terminar el tema. Pero no, es menester analizar lo visto. Y en ese terreno se puede afirmar que la diferencia fue mínima con lo que se venía proponiendo. El gol a los 55 segundos, luego del rebote fortuito que favoreció la mala definición de Medina, fue la único que sobresale entre uno y otro proceso.

Después, Central adoleció de inteligencia para manejar la pelota en el medio. Fracasos del kily González como doble cinco y de Jonatan Gómez como carrilero por la izquierda, le quietaron posibilidad de juego. Aguantó en el fondo con Broun (a pesar de algunas dudas) tapando una pelota bestial en el primer tiempo, y a Valentini se lo notó más sereno y seguro. Rivoira habló de un “cambio de actitud”. Es posible que haya intentando ser más ofensivo, pero como equipo cayó en una previsibilidad absurda. Medina es puro entusiasmo y cero talento, arrancó muy bien, pero en el momento de optar se equivocó siempre. Shaffer fue hasta el fondo con decisión, pero sus centros fueron pases a Carranza, arquero de Instituto.

Y Rivoira tardó en equilibrar el equipo en zona media. El impresionante marco lo puede haber condicionado, pero debió reforzar la línea de contención en el inicio del complemento. Necesita un cinco, y parece que tiene razón. Pero fundamentalmente debe incorporarle al equipo el concepto de juego. Atacar y defenderse dominando la pelota, imponiendo condiciones. Algo que no sabe hacer. Pero, empezó ganando y eso no se puede objetar.

Comentarios