Un confuso episodio que dejó a un suboficial de la Policía herido de bala por un colega mantuvo en vilo a los vecinos del barrio UPCN de la ciudad de Santa Fe durante la noche del sábado, cuando ambos se encontraban franco de servicios. La versión oficial indica que el mayor de los uniformados, de 30 años, salió a la puerta de su casa poco antes de la medianoche y le dio la voz de alto a un sospechoso que estaba armado, a quien le disparó porque no obedeció ante su identificación. El herido, un novato de 23 años que presta servicios en la Policía de Acción Táctica (PAT) de Rosario, pero vive en la capital provincial, repelió los plomos hasta que un proyectil le fracturó el brazo.
La misteriosa saga continuó momentos después cuando la hermana del herido, que también es policía irrumpió a los gritos en el hospital donde lo curaban y fue demorada.
En voz baja y fuera de las actas oficiales los rumores resumieron el asunto en una disputa por una relación extramatrimonial que afectaba el orgullo del oficial herido.
“Todo indica que entre los policías se conocían y había un problema de carácter personal. Aparentemente, el suboficial de la PAT hacía guardias de dos días en Rosario y se enteró que en ese lapso otro policía visitaba a su mujer. Se ve que se dio manija y el sábado a la noche fue a la casa del supuesto amante a aclarar la situación y se puso bastante pesado y desenfundó el arma. Pero la respuesta fue un disparo que de milagro sólo le fracturó el brazo”, dijo una fuente allegada a la causa.
No obstante, la versión oficial relata el hecho como una confusión que se desató la noche del sábado en inmediaciones de Doldán al 4500 de barrio UPCN de Santa Fe, ubicado al norte de la ciudad. Alrededor de las 23, un suboficial de 30 años que brinda servicio en el departamento Logística de la Policía de Santa Fe salió a la vereda de su casa y se topó con un “desconocido” que tenía un arma en la mano. Cuando le dio la voz de alto como indica el protocolo de procedimiento fue agredido a tiros y repelió el ataque con más plomo, uno de los cuales hirió al sospechoso. Para entonces, los vecinos ya habían alertado al 911 y llegó al lugar una dotación de vigilantes de la subcomisaría 14ª, que tiene jurisdicción en la zona, y trasladó al herido al hospital Cullen, donde confirmaron que era un policía de 23 años. Mientras recibía las curaciones se presentó una de sus hermanas, también empleada policial, quien protagonizó un escándalo y fue detenida, aunque más tarde recuperó la libertad.
Por el momento no hay personas detenidas y el hecho es investigado por el fiscal en turno del Ministerio Público de la Acusación y efectivos de la Unidad Regional I.
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