La investigación por el teléfono celular robado hace una semana a la fiscal Nora Marull permitió la detención de tres policías, acusados de extorsionar a una mujer para liberar a dos hombres arrestados. La caída de los uniformados se logró porque el aparato telefónico de la funcionaria judicial siguió siendo utilizado y, mediante escuchas, se supo que agentes que prestaban servicio en la comisaría 8ª pidieron dinero a cambio de liberar a dos arrestados, siempre según la pesquisa.
“Nosotros veníamos realizando escuchas al teléfono robado a la fiscal (Nora) Marull el pasado jueves 24 de enero en barrio Echesortu ya que continuaba siendo utilizado. En este marco comenzamos a escuchar conversaciones para dar con los autores del hecho y fue así que tomamos conocimiento de un pedido de dinero para liberar a dos allegados a la mujer que utilizaba el celular sustraído”, indicaron voceros de la pesquisa.
“Según las escuchas, personal de la seccional 8ª había detenido a dos hombres en la vía pública y solicitaba a una mujer, pareja de uno de los arrestados, dinero para dejarlos en libertad”, agregaron las fuentes.
Fue por ello que personal de la Dirección Provincial de Asuntos Internos se hizo presente en la mañana de ayer en la comisaría de barrio Refinería, confiscó el libro de guardia y detuvo a un cabo, una agente y a un inspector.
“Con el libro de guardia determinamos que las personas mencionadas en los llamados se encontraban detenidas en la seccional. Por lo que corroboramos la veracidad de la extorsión. A su vez, a la par de este procedimiento, allanamos un domicilio (el de la mujer que era víctima de la extorsión), donde encontramos el teléfono de Marull, junto con cámaras de fotos y demás objetos que también serían robados”, indicaron allegados a la investigación.
Los tres uniformados, identificados como el inspector C. D. C., el cabo M. S., y la agente N. P. C, fueron pasados a disponibilidad por el Ministerio de Seguridad.
La fiscal Marull fue asaltada en la noche del jueves pasado, cuando estaba llegando a su casa, ubicada en barrio Echesortu. La mujer fue abordada por dos motociclistas, quienes luego de romper el vidrio de su coche se llevaron diferentes pertenencias de la funcionaria, entre ellas un teléfono celular y una libreta con anotaciones de su trabajo, que incluían apuntes sobre la investigación por el enfrentamiento entre hinchas de Newell’s y la Policía, ocurridos el domingo 20, que derivaron en la suspensión del clásico rosarino.
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