La aviación rusa bombardeó este jueves en Siria posiciones de Al Qaida y otros rebeldes islamistas en las provincias de Idleb (noroeste) y Hama (centro), afirmó una fuente de la seguridad siria.
“Cuatro aviones de combate rusos atacaron bases de Jaish al Fatah en Jisr al Shughur y en Jabal al Jawiya (en la provincia de Idleb), y también golpearon posiciones de grupos armados, bases y depósitos de armas en Hawash, en la provincia de Hama”, indicó la fuente.
Jaish al Fatah (“el ejército de la conquista”, en árabe), agrupa al Frente al Nosra, rama siria de Al Qaida, y a otros grupos islamistas como Ahrar al Sham.
“La aviación de la coalición formada por los cerdos rusos y (el régimen sirio) ha arrasado una mezquita en Jisr al Shughur”, escribió en Twitter un miembro de la alianza islamista.
Al Nosra y Ahrar al Sham combaten tanto contra el régimen de Bashar al Asad como contra el Estado Islámico, que según Moscú es su objetivo en Siria.
El miércoles, la aviación rusa efectuó sus primeros bombardeos en Siria, a pedido del presidente Asad.
Rápidamente, los occidentales y la oposición siria en el exilio expresaron sus dudas sobre los blancos de la aviación rusa.
Moscú dice que golpeó al Estado Islámico, pero el secretario de Defensa estadounidense Ashton Carter dijo que los ataques “probablemente” no fueron contra este grupo yihadista.
Este jueves, el canciller ruso Serguei Lavrov tachó de “infundados” dichos comentarios.
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