Dos victorias y una derrota para los equipos rosarinos en la segunda fecha del Nacional de Clubes. En Las Delicias, Duendes venció a Tucumán Lawn Tennis por 25 a 16; en la Bombonerita del Parque, Gimnasia no pudo con Hindú y cayó por 31 a 8; mientras que Atlético del Rosario convirtió al Jardín de la República en su plaza de juego al ganarle a Universitario (Tucumán) por un contundente 42 a 18.
El próximo fin de semana, Duendes será local ante Cuba, pero en la centenaria Plaza Jewell, Atlético del Rosario y Gimnasia y Esgrima se medirán después de 16 años, reeditando uno de los partidos con más historia del rugby de Rosario.
Duendes volvió al éxito
Tanto Duendes como Tucumán Lawn Tennis abusaron del uso del pie, pero el local tuvo una virtud: la eficacia cada vez que pisó terreno rival, pues se volvió con puntos (tries de Rosti, Nannini y Prieto) que le daban el triunfo a un Duendes que, sin tanto volumen de juego, supo cómo imponerse. En la segunda etapa, la visita fue un poco más pero careció de ideas para dar vuelta el pleito.
El campeón del Litoral tuvo un poco más de resto, manejó los tiempos para cerrar el partido y lograr el primer triunfo en el certamen.
Mensana sin suerte
Gimnasia y Esgrima tuvo dos caras, la del primer tiempo donde jugó de igual a igual y la del segundo tiempo donde no pudo superar lo hecho en el comienzo, cometiendo muchos errores y lo más grave: no sumó puntos. El rival de turno, Hindú, pese a ser muy indisciplinado (recibió dos amarillas) siempre llevó las riendas del partido y en los momentos clave sacó a relucir la chapa de campeón defensor para llevarse de Rosario un triunfo con punto bonus.
Gimnasia deberá mejorar para poder seguir con chances de clasificación.
Plaza de alegría
Atlético del Rosario goleó a Universitario (Tucumán) por un contundente 42 a 18, con una formación plagada de jugodores jóvenes. La diferencia la sacó principalmente en la primera parte y en la segunda se encargó de sellarla. Atlético, rápidamente, pudo descifrar que a Universitario le costaba en las formaciones fijas. A partir de allí, Plaza tomó definitivamente las riendas del partido, logrando un triunfo con punto bonus (apoyó cinco tries y su rival dos), para poder afrontar los tres partidos de local y soñar con la clasificación.
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