Junto a sus ex rivales Ernesto Sanz y Elisa Carrió, el postulante presidencial de Cambiemos, Mauricio Macri, aseguró ayer que su objetivo de cara a octubre es “ganar en primera vuelta”, alcanzando el “45 por ciento” de los votos por sobre el oficialista Daniel Scioli.
“El objetivo está claro: tenemos que apuntar a ganar en primera vuelta porque somos una enorme mayoría los que queremos el cambio”, subrayó Macri, tras resaltar que a su frente lo acompañaron “6,5 millones de personas” y dando por sentado que los votantes de Carrió y Sanz lo acompañarán a él el 25 de octubre.
El jefe de Gobierno porteño se expresó de esta forma al encabezar una conferencia de prensa en el hotel Sheraton, junto a su compañera de fórmula, Gabriela Michetti, la candidata a gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal, la diputada de la Coalición Cívica y el jefe radical.
El líder del PRO, que sacó 14 puntos menos que Scioli en las Paso, remarcó que “seis de cada diez argentinos hayan apostado por el cambio” y señaló que ese escenario “abre una esperanza en el país”.
“A los argentinos les va a venir muy bien que haya una alternancia”, expresó, y deseó que el kirchnerismo “tenga una actitud constructiva desde la oposición”.
Por otra parte, Macri destacó el desempeño electoral Vidal en territorio bonaerense, al afirmar que la elección de casi 30 puntos de la vicefeja de gobierno “ha sorprendido y sacudido el sistema político argentino”.
Consultado acerca del supuesto cambio de discurso en torno a la valoración de muchas de las políticas implementadas por el kirchnerismo que su fuerza política votó en contra en el Congreso, respondió que se ha “permitido incorporar algunas ideas”, y que “aprender es cambiar”.
A su turno, Carrió subrayó que el escenario que se abre a partir de ahora es de “polarización”, y que quedaron en pie dos postulantes con serias chances: “El candidato del oficialismo y el candidato del cambio”, en referencia a Scioli y Macri.
“No hay dos candidatos, hay tres candidatos”, insistió, al ser consultada acerca de las declaraciones que formuló postulante presidencial de UNA, Sergio Massa, al sugerir que son necesarios acuerdos programáticos entre las distintas fuerzas de la oposición.
En tanto, el presidente de la UCR dio explicaciones ante el hecho de que será la primera elección general en que el radicalismo estará ausente en las boletas. “El radicalismo demostró ayer que es un partido de gobierno, que son los que están enfrente de los partidos testimoniales”, justificó.
Una voz en el teléfono
Massa y Macri dialogaron por teléfono tras las Paso del domingo y mientras el líder del Frente Renovador propuso un acercamiento para discutir “políticas programáticas”, el jefe del PRO aclaró que el diálogo que pretende es recién para el “11 de diciembre”, si gana la elección.
La movida del líder del Frente Renovador buscó ponerse en el centro de la escena, pero en Cambiemos optaron por restarle trascendencia teniendo en cuenta que ambos van a disputar votos clave del electorado opositor en octubre.
Otro escenario podría abrirse después de la elección si es que finalmente alguno de los dirigentes opositores –Macri parte con ventaja– disputa el balotaje frente a Scioli.
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