En el marco de un juicio abreviado, dos hombres fueron condenados a tres años de ejecución condicional por una tentativa de robo ocurrida en un domicilio particular a fines de junio. El acuerdo contempló también la reparación a la víctima, con la compra de un televisor de 14 pulgadas que había sido sustraído y arruinado en la huida, y una serie de reglas de conducta que prevén la abstinencia del consumo de alcohol y estupefacientes y la inscripción a una escuela de enseñanza media para adultos a fin de terminar la secundaria.
El juicio homologado por el juez Javier Beltramone fue alcanzado entre el fiscal José Luis Caterina y la defensa privada de dos hombres menores de 35 años, y la anuencia de la víctima, por el hecho ocurrido en la madruga del 27 de junio en zona norte caratulado tentativa de robo agravado, por haber sido cometido en poblado y en banda, por fractura de puerta en un lugar habitado y por la participación de menores de edad, dijo una fuente judicial.
Reparación
En el mismo, las partes pautaron una pena de tres años de ejecución condicional más la aplicación de reglas de conducta y la reparación del perjuicio sufrido por la víctima. En ese sentido, Juan Leonardo y Maximiliano Gustavo, de 25 y 35 años, fijaron residencia en Rosario y pautaron abstenerse de consumir estupefacientes y alcohol, no acercarse a la víctima y someterse a un control de la dirección provincial de Control y Asistencia Postpenitenciaria. También se les impuso que no se vinculen entre sí ni con los menores que participaron del hecho. La última regla de conducta asumida fue la inscripción y cursado de la escuela secundaria en un Empa (Escuela de Enseñanza Media para Adultos).
En relación a la reparación económica de la víctima, los imputados le compraron de forma voluntaria un televisor de 14 pulgadas que le entregaron con la factura del comercio.
Según fuentes del caso, los dos imputados junto a tres menores de edad ingresaron a un domicilio particular tras romper la puerta de entrada. Uno de los moradores avisó desde el techo a la Policía, que llegó al lugar y provocó la huida de los intrusos a bordo de un Renault 19 que fue perseguido hasta calle Polledo al 4500, donde fueron detenidos tres menores y un mayor, en tanto el quinto escapó.
En el camino habrían tirado el escueto botín, un televisor de 14 pulgadas que quedó destruido. Una vez en la subcomisaría 2ª, un hombre se presentó a denunciar el robo de su Renault 19 pero fue reconocido por efectivos policiales como el conductor que se había dado a la fuga, y quedó detenido.
El procedimiento abreviado es un mecanismo que permite que un imputado, debidamente asesorado por su defensor, acuerde monto y modalidad de su condena con el representante del Ministerio Público de la Acusación, respetando siempre las garantías constitucionales vinculadas a la defensa técnica, al consentimiento del acuerdo y a la posibilidad de su retractación hasta el momento de la sentencia, la incoercibilidad moral del imputado y el estado de inocencia, la carga de la prueba por parte del Estado y el respeto del acuerdo como límite máximo por parte del Tribunal.
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