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Villa La Boca

Lo citan como testigo de una muerte y va preso por otras dos

Hombre de 52 años fue a declarar en causa por homicidio de su cuñado, pero lo esperaba acusación por doble crimen de 2011.

Un paquetero de 52 años se presentó ayer en la Fiscalía para declarar en la causa que investiga el crimen de su cuñado, un hombre de 35 años asesinado a tiros dos meses atrás en la zona sudoeste de la ciudad, pero quedó detenido por un doble homicidio perpetrado en octubre de 2011 en el mismo barrio, en el corolario de un sangriento cumpleaños de 15. Ambos hechos se inscriben en una saga de venganzas que en los últimos años se cobró una decena de vidas y cuyo común denominador es la violencia de las balas, el único medio con el que parecen dirimirse algunos conflictos sociales en las zonas marginales. Para la Policía, se trata de “dos bandas que se disputan el territorio” por los dividendos de la venta de drogas y otros delitos; para los implicados, la única forma de impartir justicia.

En la mañana de ayer, Luis Roberto G., un paquetero de 52 años, se presentó en la Fiscalía de Homicidios Dolosos, donde había sido citado para declarar como testigo en la causa que investiga el crimen de su cuñado, Mariano “Negro” Esquivel, un hombre de 35 años asesinado de un disparo en la cabeza el 5 de abril pasado en la puerta de su casa de Felipe Moré y Uruguay, a metros de la plazoleta de villa La Boca donde tres meses antes habían acribillado a su hermano Juan Carlos (de 35 y custodio de un búnker de drogas que se hizo célebre por los homicidios en su entorno) y un día después de que atentaran contra la vida de su hermana Carina E. (ex mujer del paquetero detenido ayer) con un disparo en el abdomen del que todavía se recupera.

Otro de los hermanos Esquivel, Luis (apodado Bebe), había sido asesinado en enero de 2011 en inmediaciones de Felipe Moré y pasaje Lejarza. Tenía 29 años y en 2007 lo habían condenado a cuatro años de cárcel por el asesinato de Isabelino Farías, de 50, perpetrado en un potrero de la Vía Honda en mayo de 2005 en una riña con cuchillos tras un partido de fútbol. Por ese crimen también purgaron penas de tres años de prisión sus hermanos Arcadio, alias Cuci, y el luego asesinado Mariano, apodado Negro.

La presentación de Luis Roberto G. ayer en Fiscalía tenía como fin desentrañar parte de la saga de crímenes que le costaron la vida a tres de los hermanos de su ex mujer. Pero al pronunciar su nombre, el paquetero quedó detenido por una causa de Instrucción 3ª, a cargo del juez Luis María Caterina, en la que estaba imputado de un doble crimen fechado el 16 de octubre de 2011, en un cumpleaños de 15 celebrado en Felipe Moré y Gálvez. En esa oportunidad fueron ultimados Daniel Ramón Izaguirre, de 17 años, y Antonio Alejandro Domínguez, de 26.

Los familiares del adolescente asesinado dijeron que el cumpleaños se realizó con normalidad en una de las viviendas que se levantan al costado de las vías de Gálvez al 5000 hasta casi entrada la medianoche, cuando el pibe fue a comprar una gaseosa y se topó en el camino con un grupo de muchachos que derivó en un enfrentamiento a tiros.

En agosto de 2012, Arcadio Esquivel, de 32 años, también fue detenido por el doble homicidio.

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