El colegio La Salle cumple 100 años. Los primeros hermanos llegaron a Rosario con una propuesta educativa desarrollada en Francia, a partir de 1680, cuando Juan Bautista de La Salle crea el Instituto de los Hermanos de las Escuelas Cristianas, con presencia hoy en más de 80 países y una gran diversidad de obras que han buscado dar respuesta a las necesidades de las sociedades en las que se han insertado.
En Rosario, los hermanos no dudaron en llevar a cabo su labor educativa en diálogo con la población, realizando numerosos estudios en el proceso de enseñanza-aprendizaje y en las normas de convivencia, proponiendo nuevos derroteros de reflexión en las ciencias, la educación, la formación religiosa y los deportes, que combinaron con las expectativas propias de los niños y jóvenes que tenían a su cargo. Las realidades los condujeron a ser productores de textos, a experimentar experiencias educativas novedosas y a generar estrategias de memoria, identidad y sentido de pertenencia al colegio.
Las actuales circunstancias de cambio de época han conducido a los hermanos y seglares unidos en la misión a redescubrir las necesidades socioculturales de nuestro tiempo, desde las nuevas perspectivas que van surgiendo en el contexto mundial y continental como lo son la globalización, el pensamiento crítico y decolonial, el surgimiento de nuevos modelos de desarrollo, la visibilización de lo plural, la reconstrucción de la memoria histórica, la participación ciudadana activa, la desinstitucionalización, los problemas ambientales, el fenómeno religioso y la desigualdad que conducen a navegar en nuevas aguas y alientan a proponer alternativas de solución.
El colegio La Salle, a través de su trayectoria de 100 años, mira estas realidades desde la misión educativa, factor decisivo para la transformación social que busca la inclusión y el reconocimiento de la diversidad.
Las respuestas que precisamente se van construyendo en la comunidad educativa lasallana pasan por claves elaboradas históricamente como son la escuela, la opción por los pobres y la lectura trascendente de la vida que le permite al colegio un enfoque particular de su ser y quehacer, al tiempo que le sirve de tamiz para construir nuevos dispositivos y oportunidades para el crecimiento espiritual y cultural de sus alumnos.
Una de estas respuestas que brinda el colegio en el año de su centenario es el Proyecto Educativo Institucional que, inspirado en el Documento Regional Lasallano Latinoamericano, se constituye en un accionar colectivo de los hermanos, docentes, alumnos y padres donde se enfocan los esfuerzos por ser parte de la solución de las urgencias sociales y culturales de nuestro tiempo. Urgencias que son: democratización del conocimiento que busca, en primer lugar, diseñar, reconfigurar e implementar oportunidades de acceso al conocimiento, especialmente a la población más vulnerable de la sociedad; y, en segundo lugar, promueve el proceso de apropiación o reapropiación social de la ciencia y la técnica que requiere la sociedad para resolver los desafíos científicos, industriales, sociales, etcétera; las nuevas tecnologías de la información y la comunicación acompañadas del uso pedagógico y crítico, los desafíos culturales y sociales de estas herramientas, y el cómo los niños y jóvenes hacen uso de estas herramientas; la educación de calidad que hace referencia a la evaluación, la formación de los docentes, la didáctica de las disciplinas, las innovaciones educativas y el compromiso permanente con los alumnos; una educación en y desde la promoción del desarrollo humano sostenible, abordando el análisis de las pobrezas y la justicia social, la relación medio ambiente, la educación y la participación en la construcción de políticas culturales y convivencia ciudadana a nivel local; una educación en y desde el respeto a los derechos humanos, especialmente de la niñez y la juventud, entendiendo la educación como un bien público, una oportunidad de desarrollo y un derecho que involucran criterios éticos, políticos, culturales y espirituales.
Estas urgencias son trabajadas por los lasallanos desde el Proyecto Educativo Institucional, que tiene como eje transversal la proclamación del evangelio que busca confirmar, renovar y revitalizar la novedad de la “Buena Noticia” arraigada en la historia misma de La Salle.
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