El Hincha

Básquet

La noche que dos argentinos se consagraron campeones en la NBA

Fabricio Oberto y Emanuel Ginóbili lograron un éxito resonante y todo un recuerdo fantástico para el deporte argentino


Dos argentinos campeones de la NBA, algo impensado hasta la irrupción de la Generación Dorada y algo utópico después de ella.

Aquello sucedió un 14 de junio de 2007 y claro, no hace falta adivinar que se trató de Emanuel Ginóbili y de Fabricio Oberto con la camiseta de San Antonio Spurs.

El bahiense venía de hacer historia grande con los texanos y el pivot fue un agregado especial tras sus muy buenas labores con la selección argentina. Allí el cordobés no podía mostrar todo su talento, sino que se transformó en un jugador de rol, pero bien valió la pena el cambio para terminar destapando champán.

Esa noche, con el triunfo de San Antonio por 83 a 82 ante Cleveland, los Spurs barrían al equipo liderado por un muy joven LeBron James y lograban su cuarto título en la historia, el tercero para el bahiense y el primero para el oriundo de Las Varillas.

Aunque Tony Parker fue elegido como mejor jugador de las finales, Manu Ginóbili fue la gran figura del partido clave, goleador con 27 puntos e importante con 5 rebotes y 3 asistencias.

Siempre como sexto hombre, promedió 17,8 puntos, 5,8 rebotes, 2,5 asistencias y 1,3 robos, según indicó BásquetPlus.

“Ser el goleador es un hecho circunstancial, pero ser importante definiendo un partido decisivo, es fantástico. Es lo más hermoso del básquet”, contó Ginóbili en El Gráfico.

Oberto fue titular y tuvo una planilla con 7 puntos y 5 rebotes, anotando un doble y falta que fue festejado con Tim Duncan y fue la foto de su carrera en la NBA. “Fabricio Oberto con el doble más grande de su vida”, expresó el relator del juego, dejando en claro la importancia de la conversión del argentino. “Esa jugada creo que desequilibró el juego a nuestro favor”, dijo el cordobés.

“Me puso muy feliz verlo tan contento en su primera final en la NBA. Y verlo campeón. Tuvo una repercusión tremenda que lo hizo sentir importante. La serie contra Utah, que definió el Oeste, le vino bárbara porque frente a un equipo con jugadores altos y ásperos, fue ideal para su estilo de fajarse” expresó un Ginóbili que estaba muy contento por su hermano de la vida campeón.

Tony Parker promedió 24.5 puntos, 5 rebotes y 3.3 asistencias y Tim Duncan tuvo una enorme serie final, con 18,3 unidades, 11,5 recobres y 3,8 pases gol.

Comentarios