“Actividad física, diversión y camaradería”. Así definen a este particular deporte los hombres y mujeres de Rosario, Villa Constitución, Buenos Aires y Chaco que participan del tercer Torneo Nacional de Bicipolo, que comenzó ayer y concluirá hoy en el Skate Club de Cerrito al 700, en la primera edición del torneo de esta curiosa disciplina que se realiza en Rosario.
Desde hace ya algunos años, un grupo de jóvenes comenzó a practicar esta singular actividad nacida a principios del siglo pasado en Europa como una instancia previa para los jugadores de polo tradicional es decir sobre caballos.
“El bicipolo nace muy ligado al polo tradicional. Antes, los más chicos comenzaban a entrenar con bicicletas sobre césped, y una vez que podían dominar el control de los manubrios con una sola mano, después podían adaptarse a las riendas del caballo más fácilmente. Hasta que, finalmente, se separó y nació como nueva disciplina”, explicaron a El Ciudadano Gabriel Milanese y Alejandro Aucar Poudes, dos de los precursores de la actividad en Rosario.
El nacimiento del bicipolo en la ciudad se dio hace poco más de dos años, casi en simultáneo con Buenos Aires. “Todo comenzó con un grupo de amigos que tenían unas bicicletas especiales, que se llaman de piñón fijo. Se empezaron a juntar, a investigar en internet y de a poco fueron despertando el interés en sus propios amigos. Puede decirse que acá fue, más que nada, un constante proceso de experimentación”, contaron los jóvenes.
Asimismo, según establecieron, a diferencia del polo tradicional, el polo con bicicleta es un deporte de contacto y que no tiene demasiadas reglas, por lo que una persona que nunca ha jugado puede adaptarse rápidamente. “Participan dos equipos de tres personas cada uno y se juega a diez minutos o cinco goles, lo que ocurra primero. No se puede tocar el piso con los pies o ninguna parte del cuerpo. Y lo demás… Lo demás es experimentar”, detallaron los promotores.
Y agregaron: “Es emocionante porque estás en constante roce con el rival. El contacto permitido es jugador con jugador, bici con bici y taco con taco, siempre y cuando se esté disputando el control de la bocha. Puede decirse que es muy similar al hockey sobre hielo o rollers”.
En último término, los integrantes del equipo “Camorra” consideraron que se trata de una actividad sumamente accesible a todos y a partir de la cual se han formado grandes grupos de amigos ya que, según reconocieron, “reina la camaradería y la solidaridad y se hace todo a pulmón” basándose en el tradicional dicho: “Hágalo usted mismo”.
“Lo más lindo de jugar al bicipolo es justamente todo lo que está alrededor. Las personas que llegan al grupo son generalmente aquellas que ya tienen la bicicleta metida en la cabeza, que andan todo el día o que hasta trabajan con ella. Sin embargo, notamos también que últimamente se está sumando mucha gente que por ejemplo no se subía a una bici hacía 10 años y que después terminó adoptándola como una forma de vida”, concluyeron.
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