Policiales

Oscura balacera

La causa contra el comisario Valdés será investigada por la Justicia Federal

Así lo resolvió el camarista Aníbal Pineda luego de que dos jueces de distinto fueros se excusaran por conflictos de competencia. El secuestro de un bolso y un jean con restos de metanfetamina entre las pertenencias del comisario baleado fueron cruciales en la resolución final.


La investigación penal que tiene como protagonistas a los ex jefes de la Policía Federal de la ciudad de Santa Fe Mariano Valdés e Higinio Bellaggio continuará en manos de la Justicia Federal luego de una resolución que ayer puso punto final al conflicto de competencia.

La Cámara Federal de Rosario resolvió que el juez federal de Santa Fe Francisco Miño, quien se había excusado de llevar la causa, es competente para esclarecer la oscura balacera en la autopista Buenos Aires-Rosario en la que resultó herido Valdés, quien brindó una declaración endeble y desmentida por la oficial que lo acompañaba. Las pericias sobre un bolso que llevaba con restos de metanfetamina y éxtasis fueron cruciales para resolver el conflicto de competencia entre la Justicia provincial y federal.

El camarista Aníbal Pineda recordó en su resolución de ayer que la jueza provincial Marisol Usandizaga se había declarado incompetente al entender que los acontecimientos que vinculan a Valdés están íntimamente relacionados con los ilícitos contemplados en la ley 23.737 de estupefacientes, por lo que debería intervenir la justicia Federal.

Pineda agregó que más tarde hizo lo propio el juez federal Miño, quien consideró que tampoco él tenía competencia territorial ni material para juzgar los hechos investigados.

Pero el camarista resaltó desacertada su valoración al resaltar las pericias que se realizaron sobre pertenencias de Valdés, un bolso y un jean secuestrados el 20 de septiembre pasado, que tras ser analizados arrojaron que tenía micro partículas de metanfetamina.

En ese sentido, el juez valoró el planteo del fiscal, quien sostuvo que no se puede descartar que la pequeña cantidad hallada no haya constituido una parte de un lote de cantidad superior.

Entre los argumentos de la Cámara también se resaltó que la droga fue secuestrada del interior de una “costosa” camioneta marca Mitsubishi, que sería propiedad del comisario Valdés, estacionada en cercanías de la delegación de la Policía Federal de Santa Fe, por lo que no se puede descartar que se encuentren implicados agentes de alto rango, por lo cual la estructura policial podría verse involucrada.

Por otro lado, el juez valoró el planteo de la defensa de los policías detenidos, quienes reclamaron que el conflicto de competencia le impedía ejercer una eficaz defensa debido a que tanto la jueza provincial como el juez federal se habían declarado incompetentes, y mientras tanto, se veían vulnerados los derechos de defensa de los acusados.

La noche del 9 de septiembre Valdés y la suboficial Rosana González viajaban en un Ford Focus desde Buenos Aires hacia Santa Fe. Según declaró el comisario, en el camino detuvieron la marcha en la banquina para cambiarle la yerba al mate cuando fueron atacados a disparos por integrantes de una camioneta de doble cabina. Esa versión se diluyó no solo con la declaración de González, sino con las pericias balísticas.

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