Una mujer de 74 años permaneció más de dos días atada de pies y manos en su casa, tras ser asaltada por dos hombres en cercanías de la localidad de Arroyo Seco, y luego de ser hallada debió ser internada al presentar un cuadro de deshidratación, además de golpes, informaron fuentes policiales. La llegada de sus sobrinos, anteayer por la tarde, la salvó de una muerte segura.
El hecho se registró el martes pasado alrededor de las 11 en un predio ubicado en un camino rural que comunica Arroyo Seco con la localidad de Albarellos (departamento Rosario), detallaron los voceros. La mujer, identificada como Margarita V. (de 74 años), quien vive sola, fue rescatada anteayer alrededor de las 17.30 por familiares que se acercaron a la vivienda preocupados porque no respondía los llamados telefónicos.
Según la denuncia de sus sobrinos Adriana D., de 31 años, y Cristian T., de 41, la puerta de acceso a la vivienda estaba entreabierta y Margarita se encontraba tirada en el piso atada de pies y manos con precintos.
Pese a un cuadro de deshidratación que presentaba, a raíz del cual fue internada en un centro asistencial privado de Arroyo Seco, la mujer pudo contar que en la mañana del martes pasado llegaron a su casa dos hombres en un auto Peugeot gris y le preguntaron si vendía cerdos, a lo que les respondió que no.
De inmediato, según describió, la mujer fue reducida por los hombres que, bajo amenazas con pistolas, la obligaron a entrar a la casa, la golpearon, ataron y le robaron 1.500 pesos, una escopeta 16, un revólver 38, una caja de balas de este último calibre y un rifle de aire comprimido, detallaron los informantes.
La víctima permaneció más de 48 horas tirada en el piso, y fue rescatada por los sobrinos, que llamaron a la Policía y una ambulancia que la trasladó a la clínica Martins arroyense.
Según dijo desde su lugar de internación Margarita a Arroyo Diario, eran dos los ladrones, a quienes les pidió: “No me maten”. Mientras uno se quedó en el auto el otro estuvo alrededor de una hora revolviendo la casa. Junto con las armas y el dinero también se llevaron unas ollas Essen, algunos fiambres y bebidas que tenía en la heladera y su cartera, donde además de los billetes tenía documentación y el celular.
De acuerdo con su relato, se arrastró hasta el exterior de la vivienda y se esperanzó al ver pasar dos veces a un vecino, aunque éste jamás miró hacia el patio de la casa. Así las cosas, decidió volver al interior y así pasó los dos días hasta que la providencial aparición de sus sobrinos le salvó la vida.
Investiga el caso la Fiscalía de Flagrancia con auxilio del personal de la comisaría 27ª de Arroyo Seco, con jurisdicción en el lugar del golpe.
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