Un joven de 19 años fue atacado a tiros anteanoche en la zona de villa de Flammarión al 5000. Según dijeron familiares de la víctima, salió de la casa de su suegro para hacer unas compras en un quiosco cuando un grupo de desconocidos lo agredió. Sin embargo, vecinos señalaron que el muchacho, un poco borracho, intentó robar y fue baleado por la supuesta víctima. El herido fue internado en el Heca, en estado delicado. Unas horas después de recibir la atención médica, se fugó del hospital; pero ayer al mediodía se volvió a presentar en el centro de salud para solicitar asistencia por sus lesiones.
Lautaro G., de 19 años, entró al hospital de avenida Pellegrini al 4200 unos minutos antes de las 23 del jueves, trasladado por un móvil del Sies. Según el diagnóstico médico, el joven tenía múltiples heridas de arma de fuego en el cuello y la espalda por las cuales debieron operarlo.
En el Heca, uniformados de la UR II entrevistaron a Yésica, la novia del baleado. Ella aseguró que anteanoche ambos estaban comiendo en la casa de su papá, el suegro de Lautaro, que vive en Margis al 5000. Pasadas las 22, el muchacho decidió salir a un quiosco que está a la vuelta de la vivienda del padre de la muchacha para comprar una gaseosa. Luego de un rato, al ver que su novio no volvía, la joven decidió salir a buscarlo y se lo encontró en la esquina de Margis y Lamadrid baleado. Ella aseguró que la víctima no tiene rivalidades ni problemas con nadie.
Luego de pasar algunas horas internado, Lautaro se fue del hospital en forma furtiva, sin tener el alta médica. Pero, ayer al mediodía, el herido se presentó de nuevo en el centro de salud, donde volvió a ser internado. Fuentes del caso señalaron que su estado de salud era anoche reservado.
Versiones de calle
Vecinos del barrio donde ocurrió el ataque aseguraron que lo que ocurrió anteanoche se dio ante un intento de robo. Siempre de acuerdo con esta versión, Lautaro, alcoholizado, intentó asaltar a un hombre, que se defendió y le disparó en varias ocasiones. A su vez, voceros del caso no descartaron que los tiros puedan estar relacionados con una pelea territorial entre bandas de la zona. Las mismas fuentes de la investigación aseguraron que en la supuesta escena del crimen no pudieron hallar indicios del tiroteo o manchas de sangre.
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