El Hincha
Sin invicto, con el ánimo maltrecho tras dos derrotas seguidas y con la certeza de que la temporada que viene Newell’s arranca en zona de descenso directo. Héctor Bidoglio enfrenta su etapa más difícil como conductor de la Lepra, que el sábado sufrió un duro traspié en casa ante Talleres y encima se quedó sin varios jugadores clave para afrontar el siguiente desafío ante Gimnasia en La Plata.
El 2-4 ante River en Núñez y el 1-2 frente a los cordobeses en el Parque Independencia llegó para recordarles a todos los hinchas lo que apenas unos pocos podían (o mejor dicho aceptaban) ver: Newell’s es uno de los peores equipos de la Superliga y el campeonato que viene necesitará hacer un verdadero campañón para mantener la categoría.
Con muy poco le hacen mucho daño y por más genere le cuesta horrores embocarla. Un combo letal para un equipo que no logra encontrar regularidad, esa que genera confianza y seguridad, atributos que el elenco rojinegro no viene exhibiendo desde hace un largo rato y que tanto necesita para encarar la monumental tarea que se le viene: la lucha por la permanencia.
Es por eso que el paso que se viene será crítico: hay que conseguir como sea los tres puntos ante el Lobo en el Bosque, ahí donde también reina la preocupación y el apremio. De hecho Gimnasia, que perdió el clásico con Estudiantes en un partido repleto de polémica, es hoy por hoy el único equipo que tiene abajo la Lepra en la tabla de los promedios del próximo torneo.
Toda una final anticipada. ¿La buena noticia? Vuelve Maxi y casi seguro el Gato Formica también. ¿La mala? No estarán los dos motorcitos del mediocampo, Jerónimo Cacciabue y Braian Rivero (roja y límite de amarillas), así como tampoco el lesionado Mariano Bittolo, aunque la baja del lateral tal vez habría que contarla entre las buenas dado su rendimiento en los últimos partidos.
Hasta el viernes hay tiempo de sobra para pensar bien las cosas. ¿Qué hará Bidolgio?
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