Edición Impresa

Excarcelaron al Panadero, pero no podrá ir a la cancha

Tampoco deberá acercarse al domicilio particular y laboral del patovica que lo acusó de atacarlo a tiros.

La Justicia ordenó en la tarde de ayer la excarcelación del sindicado jefe de la barra brava de Newell’s, Diego Panadero Ochoa, quien había sido detenido el martes por un incidente ocurrido en la madrugada del domingo en la puerta de un bar de Balcarce al 200, donde fue baleado un patovica de 35 años que acusó a Ochoa como autor del ataque. Además fue liberado Luis Bassi, también hincha rojinegro, a quien señalaron como acompañante del Panadero al momento del hecho. En tanto, se prorrogó la restricción para asistir a ver los encuentros que juegue el equipo del Parque Independencia hasta la finalización del torneo Apertura para un centenar de hinchas, entre quienes está Ochoa.

Voceros judiciales indicaron que Ochoa fue liberado pero con restricciones. “Tiene prohibido acercarse en un radio de 200 metros del domicilio particular y laboral” del patovica Sebastián Rolando G., herido de bala en la madrugada del domingo en la puerta del bar Athipiko 2, de Balcarce al 200, remarcaron las fuentes.

La decisión la tomó la jueza de Instrucción 5ª, María Luisa Pérez Vara, donde recayó la causa ya que Bassi tiene otra investigación abierta en dicho juzgado por un hecho de estafa registrado en 2006.

Según fuentes allegadas a la causa, la determinación judicial no significa que Ochoa quede desvinculado del caso, aclararon los voceros, ya que se continúan haciendo diligencias, entre ellas peritajes sobre los videos presentados por los abogados del Panadero, en los que se lo ve junto a su familia y amigos en la noche del sábado. También será revisado el disco rígido de la computadora que graba dichas imágenes, explicaron los voceros.

Ochoa quedó detenido el martes por la mañana, luego de presentarse junto a su abogado ante el juez Jorge Baclini, en el marco de la investigación por un ataque a balazos contra Sebastián Rolando G., un patovica de 35 años, en la puerta de un boliche de Balcarce al 200, ocurrido en la madrugada del domingo pasado.

El Panadero se puso a disposición de la Justicia y aportó, como prueba de donde estuvo la noche del sábado y madrugada del domingo, las imágenes captadas por el sistema de seguridad que puso luego de los incidentes ocurridos en septiembre pasado, cuando fue golpeado en la tribuna del Coloso y el posterior ataque a tiros a la puerta de su vivienda.

Las imágenes, que están siendo peritadas, muestran a Ochoa y su familia en su casa el sábado por la noche junto a una pareja de amigos y que, luego de salir a despedirlos, el Panadero ingresó nuevamente a la vivienda y no volvió a salir hasta casi las 10 del domingo. Además, puso a disposición del juez Baclini los datos de las personas que estuvieron en su casa.

El nuevo incidente en el que aparece la interna de la barra brava rojinegra ocurrió cerca de las 2.30 del domingo pasado, cuando Sebastián Rolando G., resultó herido de un disparo en la pierna derecha mientras estaba en la puerta del boliche Athipiko2. La víctima del ataque señaló como autor del disparo a Diego Panadero Ochoa, quien iba como acompañante en una moto que manejaba Luis “Pollo” Bassi, también hincha rojinegro y allegado al Panadero.

Sin ver a Newell’s hasta 2011

Un centenar de hinchas rojinegros, a quienes se les había aplicado el derecho de admisión al Coloso y a otras canchas donde se presente el equipo que dirige Roberto Sensini seguirán dentro de ese régimen al menos hasta el final del torneo, según indicaron fuentes judiciales.

La decisión fue tomada por el juez de Instrucción 4ª, Juan Carlos Vienna, luego de reunirse con autoridades policiales, del club Newell’s Old Boys y del Ministerio de Seguridad de la provincia, aunque los voceros aclararon que algunos casos serán revisados la semana próxima.

“La medida se aplica a cinco partidos, tres de visitante y dos de local”, remarcaron las fuentes.

De esta manera se prorrogó el derecho de admisión para casi un centenar de barrabravas rojinegros, quienes deberían abstenerse “de concurrir al estadio de NOB, interdicción que se hará extensiva a un radio de 500 metros del lugar y a todo otro estadio en el cual dicha institución juegue, sea por el torneo oficial o en forma amistosa”.

Esta medida, dictada en primer término el 16 de septiembre pasado, se tomó luego de los incidentes ocurridos el sábado 4 de septiembre en una de las tribunas del Coloso, donde fue golpeado el líder de la barra brava, Diego Panadero Ochoa. Por este hecho, Ochoa acusó a varias personas, entre ellos varios de quienes, hasta poco tiempo antes, estaban a su lado en la tribuna.

Con esta nueva prórroga, unos cien hinchas estarán privados de presenciar los partidos de Newell’s hasta el año próximo.

Comentarios