Satisfecho por el resultado, no tanto por el juego. Así se marchó Miguel Ángel Russo de Liniers, donde Central igualó sin goles con Vélez por la fecha 16 de la Liga Profesional. Es que teniendo en cuenta la gran cantidad de bajas que sufrió el plantel, para el DT auriazul el punto en rodeo ajeno cotiza y mucho. “Suma mucho porque habla de la fuerza de este equipo”, sentenció Miguel.
Y enseguida agregó: “Sabíamos que era un partido duro. Ellos tenían la necesidad de ganar y nosotros llegamos un poco desarmados, especialmente en el medio, con jugadores que no tenían tanto ritmo. Vélez en algún momento tuvo el dominio del balón, pero lo peleamos”.
Con Montoya lesionado y Ortíz sancionado, además de las ausencias de Véliz e Infantino (convocados al Sub 20 que disputará el Mundial), el DT canalla analizó lo que pasó en el José Amalfitani: “La línea defensiva está bien, especialmente con los centrales, somos muy fuertes, sostiene al equipo y soluciona muchas cosas. Pero nos faltó un poquito más en el medio y arriba, un poco más Campaz. Tuvimos muchas bajas y hubo que resolver sobre la marcha, para eso estamos los entrenadores”. “El empate fue bueno y lo valoro, no es fácil con tantas bajas”, resumió Russo.
“Normalmente Central juega mejor”, insistió el entrenador, quien aprovechó para destacar la tarea de Francis Mac Allister y Agustín Toledo en el doble cinco: “Les vi muchas cosas buenas, aunque el ritmo de Primera División no es fácil, es muy intenso”.
“A nivel de juego uno pretende mucho más. Mucho de lo que pasó en el partido estaba dentro de lo previsto. Nosotros vamos partido tras partido. Es un plantel corto con muchos chicos, vamos buscando lo mejor, la idea es mantenernos. La localía nuestra es muy fuerte y competimos bien. Costó mucho porque arrancamos tarde. Estoy contento pero tampoco me conformo”, afirmó Miguel Russo, quien ya se habrá puesto a trabajar en lo que será el próximo desafío del Canalla: Defensa y Justicia en el Gigante de Arroyito, este viernes a las 19.
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