El Gobierno oficializó hoy la resolución que ordena retrotraer los precios de los combustibles a los valores vigentes al 31 de julio pasado. De esta forma, el Ejecutivo busca mediante la Ley de Abastecimiento controlar los valores de las naftas, en lo que en rigor es un nuevo capítulo de su pelea con la compañía anglo-holandesa Shell.
En su resolución 295/2010, publicada hoy en el Boletín Oficial, la Secretaría de Comercio Interior, a cargo de Guillermo Moreno, dispuso que el precio de comercialización de los combustibles líquidos deberá ser igual al vigente al día 31 de julio de 2010.
“Cada uno de los integrantes de la cadena de comercialización, intermediación, distribución y/o producción, podrá denunciar su incumplimiento”, agrega la resolución, que comenzará a regir a partir de mañana.
Según trascendió de fuentes oficiales, desde hoy cerca de 50 inspectores recorrerán las estaciones de servicio para controlar que la medida se cumpla.
El principal perjudicado por la resolución es la empresa Shell que en pocos meses incrementó sus precios en 7 centavos para las naftas, y 6 centavos para el gasoil. Otras afectadas serán las estaciones de terceros en el interior, donde se pagan mayores costos.
La pelea entre el Gobierno (léase Moreno y Néstor Kirchner )y Shell ya es todo un clásico. La compañía es la única que no es invitada a las reuniones que convoca la Secretaría de Comercio Interior. La tensa relación tuvo su clímax cuando el ex presidente llamó a no comprar combustible allí, y siguió con multas impuestas a la petrolera en 2006 y 2007.
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