Ciudad

Ómnibus tardan la mitad con carrilles exclusivos

Por Diego Montilla.- Para el municipio indica alto respeto a la norma, dados los 300 mil vehículos diarios que atraviesan el centro.

Según datos brindados por el municipio, en siete días –entre el 22 y el 28 de febrero– se labraron un total de 626 multas por incumplir con las nuevas normativas que se establecieron a partir de la creación de los carriles exclusivos. A la hora de desglosar esa cantidad, desde la Subsecretaría de Prevención y Seguridad Ciudadana se indicó que 231 infracciones detectadas fueron por circular o estacionar en los corredores creados especialmente para colectivos y taxis; 128 actas fueron realizadas por girar a la derecha donde no está permitido y 267 por mal estacionamiento en las áreas de carga y descarga en las calles transversales. La cifra es considerada como “un número menor” frente a los cerca de 300 mil vehículos que circulan promedio por día por la zona del microcentro, fue lo que remarcaron a este diario de manera oficial.

Por otra parte, la gerenta general del Ente de Transporte de Rosario (ETR), Mónica Alvarado, destacó que desde su área están “muy conformes porque se ha producido una reducción importante en el tiempo de viaje”. “Estamos hablando de que el tiempo máximo para recorrer el microcentro antes de la implementación de los carriles era de 25 minutos mientras que hoy el tiempo promedio es de 12,4 minutos y el máximo fue de 15 minutos, o sea que estamos en una reducción de diez minutos en el tiempo de viaje como mínimo. Esto implica que reducir diez minutos en el viaje de ida y diez minutos en el de vuelta la verdad es que es mucho tiempo para disfrutar de otra manera y no arriba del colectivo”, subrayó.

Sobre las multas, la funcionaria explicó: “Hemos visto una amplia gama de cumplimiento por parte de todos. La verdad es que hay un acatamiento importante en cuanto a las normas. Lo que más nos cuesta implementar es que la gente tenga conocimiento, más que de los carriles en sí mismo, de qué pasa en las calles transversales, porque tenemos señalizado con un cordón amarillo el ascenso y descenso de personas, luego viene un espacio reservado con cordón verde y señalización con cartelería del mismo color y un espacio reservado para carga y descarga de mercadería. Esa es una nueva señalización que quizás no es demasiado conocida y es aquí donde estamos prestando mucha atención para garantizar que este espacio sea reservado para la carga y descarga porque permite una fluidez mucho mayor al tránsito”.

“Tuvimos dos inspectores con inconvenientes, y lo que le pedimos a la gente es que tome conciencia de que no es necesaria la agresividad, que la calle es un espacio público y que la tenemos que compartir entre todos y ese compartir significa respetar las normas de cada uno para poder circular mejor”, agregó Alvarado.

El coordinador de la Subsecretaría de Prevención y Seguridad Ciudadana, Gregorio Ramírez, coincidió con la gerenta del ETR al evaluar que “hablar de poco más de 600 multas con el flujo de vehículos que circulan en el microcentro es un número menor”. “Cuando sabemos que ingresan diariamente al microcentro desde todos los accesos de la ciudad unos 300 mil autos todos los días en horario pico, éste no es un número muy elevado por lo que podemos decir que el rosarino en general está entendiendo bien de qué se trata lo de los carriles exclusivos”, afirmó.

Por otra parte –y a poco más de tres semanas de la implementación del sistema– se siguen escuchando quejas de comerciantes que –dicen– se vieron afectados por la iniciativa. Luis Canto, titular de The Lumbre, una mueblería ubicada en Maipú 1211, comentó que el impacto de los corredores exclusivos es “totalmente negativo” para su negocio. “Digo esto porque tenemos un 60 por ciento menos ventas al cierre del mes, porque no tenemos circulación de gente. Con respecto a calle San Martín a la misma altura, donde no es peatonal, nosotros la caminamos en distintos horarios y eso parece una ciudad mientras que donde estamos nosotros parece un pueblo. No hay transeúntes en la calle. Nosotros nos miramos entre los vecinos. Yo desde la vidriera de mi negocio veo que los comerciantes salen a la puerta y cabecean para un lado y para el otro para ver si hay gente y no la hay”, remarcó.

“No le vamos a echar la culpa al tema económico porque estadísticamente los comercios llevamos un control de que hay meses flojos y altos pero este es un mes normal. Para nosotros, los muebleros, estos meses son fuertes porque vienen los estudiantes y renuevan los muebles, pero la actividad se movió muy poco. En mi caso hay que sumarle que los fleteros no levantan un mueble porque no tienen dónde estacionar. Por el momento a nosotros nos ganan por mayoría. Intentamos que las cosas cambien pero directamente no nos reciben (las autoridades). Nosotros no somos piqueteros, no vamos a andar cortando una calle. Voy a tener que optar por mudarme de esta zona. Todos sabemos los alquileres altos que tienen los locales en el centro. Sumémosle que se baja un 60 por ciento y concluimos que son negocios que van a la quiebra directa”, auguró Canto.

Comentarios

10