A pocos días de asumir, el presidente electo Mauricio Macri mantuvo ayer en Brasilia un encuentro con la mandataria Dilma Rousseff, con quien analizó la situación política en Venezuela y la integración comercial en el marco del Mercosur, al tiempo que se pautó una próxima visita de la jefa del Estado a Buenos Aires. El todavía jefe de Gobierno porteño aprovechó su visita al país vecino para reunirse con empresarios de San Pablo, a quienes les pidió que inviertan en la Argentina.
“La presidenta me informó que los cancilleres van a coordinar una fecha para recibirla en visita oficial, con sus ministros para intercambiar área por área, y con una importante delegación comercial”, confirmó Macri tras el encuentro con Dilma, que por estos días afronta un pedido de juicio político en medio de una embestida opositora.
El líder del PRO explicó además, durante una conferencia de prensa, que Rousseff visitará el próximo 10 de diciembre la Argentina para participar de los actos de traspaso del mando y que en esa ocasión se producirá un nuevo encuentro bilateral.
“Quiero decirles que claramente quería que nuestra primera visita, aún sin haber asumido como presidente, fuera a nuestro país hermano de Brasil para ratificar el afecto, el compromiso, el respeto y la confianza que tenemos a construir un futuro mejor juntos para ambos pueblos”, dijo. Y agregó: “Realmente tenemos mucho para complementarnos, tenemos desafíos comunes muy importantes y hay que ratificarlo día a día en un trabajo inteligente donde podamos sumar”.
En los últimos años, la relación entre la Argentina y Brasil se amesetó debido a los roces comerciales por las barreras que impusieron ambos países al ingreso de productos, lo que será un desafío a revertir para la próxima administración. Sobre el futuro del Mercosur, Macri señaló que con Dilma coincidieron en “un compromiso para darle dinamismo, mejorar los vínculos comerciales, ir planificando metas de integración más audaces en el tiempo”.
En ese contexto, coincidieron en avanzar en las negociaciones por un acuerdo comercial entre el Mercosur y la Unión Europea, que Rousseff y su par uruguayo, Tabaré Vázquez, venían impulsando pero sin contar con el visto bueno de la gestión de Cristina Kirchner.
“Coincidimos en que en el momento en que el Mercosur pone una propuesta sobre la mesa también en simultáneo Europa ponga la suya y que eso comience un proceso intenso de negociación, donde el punto más delicado en este tipo de acuerdos es la integración agrícola”, advirtió.
Macri señaló que vio “muy tranquila” a Rousseff, quien le “explicó lo que estaba sucediendo” sobre la apertura de un juicio político en su contra. “Claramente es un tema que no corresponde injerencia. Confío plenamente en las instituciones de Brasil, un país fuerte, sólido, que ha demostrado a lo largo de las últimas décadas consolidación de su sistema democrático”, dijo. Por otra parte, Macri, quien se presentó junto a sus designados jefe de Gabinete Marcos Peña y la canciller Susana Malcorra, confirmó que dialogaron con Rousseff sobre la situación política en Venezuela, donde ambos están –según dijo– “observando” lo que ocurrirá en las elecciones legislativas de mañana.
En el marco de su gira, que continuó por Chile, Macri también visitó la ciudad de San Pablo, donde se reunió con miembros de la Federación Industrial paulista (Fiesp), a quienes invitó a invertir en “el plan de infraestructura más grande de la historia argentina”.
“Quiero que ustedes sean activos y nosotros vamos a fijar reglas de juego claras, transparentes y competitivas en igualdad de condiciones. Para lograr la confianza necesaria tenemos que ser previsibles. Contamos con ustedes, la Argentina es su casa y están todos invitados a invertir”, señaló el líder del PRO, quien fue recibido con alfombra roja y durante el almuerzo que compartió con los empresarios le otorgaron la Orden del Mérito industrial San Pablo de manos del presidente de la Fiesp, Paulo Skaf. En ese contexto, Macri dijo que la Argentina “va a cumplir con el fallo de la Organización Mundial de Comercio que pide que se desmonte el mecanismo de las declaraciones juradas anticipadas de importaciones”. Y puntualizó: “Esperamos un tiempo de transición con nuestros amigos de Brasil para avanzar en un nuevo esquema comercial”.
Con Bachelet, por una relación bilateral “creíble y a largo plazo”
Mauricio Macri fue recibido ayer por la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, con quien habló de política regional y planteó su deseo de que ambos países tengan una relación “creíble y a largo plazo”. En el encuentro que duró 50 minutos en el Palacio de la Moneda, sede del Ejecutivo chileno, Macri planteó la necesidad de “dinamizar” el Mercosur y de ir “convergiendo en la Alianza del Pacífico”, bloque conformado por Chile, Colombia, México y Perú.
En una breve conferencia tras la reunión, Macri remarcó su intención de “volver a exportar gas a Chile”, pero advirtió que es necesario “hacer un ejercicio sobre cómo integrar la matriz económica de la región”. “Le decimos a los chilenos que queremos una relación creíble y a largo plazo”, sostuvo.
“Hay que volver a darle vitalidad y funcionamiento activo al Mercosur, que ha sido postergado y dilatado. Y a la vez hay que ir convergiendo hacia la Alianza del Pacífico. Hay que entender que juntos en la región vamos a tener mejores posibilidades para insertarnos en el mundo”, agregó Macri.
Plan económico cerca de Estados Unidos
El futuro ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay, mantuvo ayer una conversación con el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Jack Lew, quien le manifestó su deseo de mantener una “relación de trabajo productiva”. El funcionario norteamericano respaldó el enfoque del gobierno de Macri en buscar un crecimiento económico “más fuerte y sostenible” y en “las reformas para encarar los desequilibrios del país”. Desde el equipo económico de Prat Gay apuntan a restablecer lo más rápido posible las relaciones con Washington. Incluso, ya se iniciaron conversaciones con bancos y organismos internacionales para negociar créditos.
Siete presidentes de la región asistirán a la asunción
Un total de siete presidentes de la región confirmaron ya su visita a la Argentina el próximo jueves para asistir a la ceremonia de asunción presidencial de Mauricio Macri. Entre ellos figuran Michelle Bachelet (Chile); Ollanta Humala (Perú); Juan Manuel Santos (Colombia); Rafael Correa (Ecuador); Evo Morales (Bolivia); Horacio Cartes (Paraguay); Dilma Rousseff (Brasil); además del presidente de Serbia, Tomislav Nikolic; el rey emérito Juan Carlos I de España y los vicepresidentes de Costa Rica, Ana Helena Chacón Echeverría; El Salvador, Óscar Ortiz, y el vicepresidente del Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional China, D. JI Bingxuan.
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