El peronismo provincial recibió con cautela, casi con escepticismo, el anuncio del gobierno sobre la contención del gasto corriente. Mientras los diputados del PJ salieron ayer a pedir “precisiones” sobre el anunció del Ejecutivo, el ministro de Economía Ángel Sciara reiteró su malestar por las críticas de la oposición a la política de gastos del Frente Progresista: “Me ofende que se hable tan alegremente de un problema profundo. No hay fiesta socialista”, dijo en respuesta a la diputada provincial María Eugenia Bielsa. “Lo que hicimos es mejorar las condiciones de los trabajadores provinciales y de los hospitales”, siguió Sciara. “Si eso es la fiesta socialista, bienvenida sea la fiesta”.
El Ejecutivo anunció el fin de semana un paquete de medidas de ahorro –con epicentro en el llamado “gasto de funcionamiento”: viáticos, telefonía, contratos de servicio– sobre las cuales ayer Sciara no dio mayores precisiones –en cuanto a cifras– pero aclaró que no alcanzarán, por sí solas, para solucionar el problema de fondo: “Esto no resuelve el problema del déficit”, aclaró el ministro.
“Esperemos que no sea sólo propaganda sino una herramienta efectiva para enderezar la economía de la provincia”, afirmó Lacava, sumándose así al interbloque de la Cámara baja conformado por las bancadas kirchnerista, Movimiento Evita, Producción y Trabajo, 100% Santafesino y Partido del Progreso Social, que exigieron al gobierno provincial que “brinde precisiones respecto del presunto recorte que llevaría adelante el Ejecutivo en lo que hace al gasto corriente”.
Los legisladores, además, criticaron al ministro de Economía: “No puede enunciar generalidades y encima desconocer cuánto es el gasto en viáticos, telefonía móvil, sueldos de cargos políticos y otros rubros englobados en las erogaciones corrientes”.
Darío Mascioli, Gerardo Rico, Silvia de Césaris, Germán Kahlow y Oscar Urruty, presidentes de los bloques mencionados, salieron al cruce de declaraciones del titular de la cartera económica: “Si Sciara dice que recortará un veinte por ciento el gasto en celulares, debe decir cuál era el monto de esas erogaciones, sino es una mera banalidad”, plantearon los diputados.
Al mismo tiempo, señalaron que “a pesar del reconocimiento implícito del importante déficit de las cuentas públicas, con un rojo de 1.700 millones de pesos, no se escuchó de boca de los funcionarios del gobierno provincial una explicación razonable a este desfase económico que pone en riesgo obras en el área de la salud, puestos de trabajo, provisión de servicios y previsibilidad en el cronograma de cobro de haberes de los trabajadores públicos”.
Por otra parte, el interbloque expresó que “se sigue hablando de «complicaciones financieras», y en realidad el rojo en las cuentas públicas va camino a cumplir un lustro, porque se arrastra desde el inicio de la gestión de Hermes Binner, cuyo ministro de Economía es el mismo que ejerce en la actualidad”.
Lamentos y respuestas
Apenas conocido el plan de “contención del gasto corriente”, el diputado obeidista Mario Lacava salió a preguntarle a Sciara cuánto ahorrará el Estado con el plan, que congela a valores de 2011 los gastos de funcionamiento y elimina viáticos de empleados y reduce viajes al exterior. “Si la contención de gastos propuesta por el ministro Sciara alcanza para controlar el déficit, tal vez el gobierno no tenga la necesidad de endeudarse ni de aumentar los impuestos”, se ilusionó Lacava.
Sobre el porcentaje de ahorro estimado que la provincia buscaría alcanzar mediante el plan, el legislador justicialista reclamó: “Es imprescindible que el ministro diga, con precisión, cuánto dinero ahorrará mensualmente el Tesoro provincial con las medidas anunciadas y cómo se reforzará esa economía en el futuro inmediato. Esperemos que estos anuncios no sean sólo propaganda, sino que este plan de reducción del gasto sea una herramienta efectiva y concreta para enderezar la economía de la provincia”.
“Más allá de que ignoramos el verdadero impacto económico que tendrá el programa de contención de gastos corrientes anunciado por el ministro Sciara, su mera formulación es una explícito reconocimiento de que en estos últimos años se han venido administrando mal los recursos de todos los santafesinos”, continuó Lacava. “Lamentamos que no nos hayan escuchado antes, cuando desde una oposición seria, documentada y constructiva observábamos que los gastos corrientes superaban ampliamente los recursos, situación que iba a terminar irremediablemente mal”.
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