Claudio Adrián Bolaño, el bajista de Freddy y Los Solares, se presentó en la mañana de este sábado en la seccional 2ª de Capitán Bermúdez luego de varios días en las que no se conocía su paradero y se había activado una búsqueda tras la denuncia de su desaparición. Apareció sin ningún problema de salud y dijo que se fue de su hogar por propia voluntad. Mientras muchos intentaban ubicarlo y temían lo peor, dijo que estuvo en la casa de un amigo en Rosario.
Voceros de la Unidad Regional XVII y de Fiscalía confirmaron la aparición sano y salvo del músico, de 44 años. Su pareja, Verónica, lo vio por última vez el sábado pasado al mediodía, cuando salió en bicicleta hacia la casa de un compañero para irse a un show que Freddy y Los Solares iba a ofrecer en Buenos Aires.
Versiones dispares sobre la desaparición del bajista de Freddy y Los Solares
“Vuelvo a la noche porque tocamos temprano”, avisó el bajista en su casa de Villa Cassini, en Capitán Bermúdez, según declaró Verónica. Lo que se supone es que desde la casa del compañero, ambos músico partieron en auto hasta el domicilio de Freddy Cristaldo, el líder de la banda, que vive en Granadero Baigorria. Alrededor de las 14 del sábado, la traffic con todos los integrantes del grupo de cumbia arrancó hacia Santa Lucía, localidad del noroeste bonaerense ubicada entre San Pedro y Arrecifes.
Desde entonces, Verónica perdió contacto con Claudio. “El celular le anda mal y se le apaga”, lamentó. La última vez que el teléfono del bajista mostró actividad fue alrededor de las 21 del sábado. El domingo a la mañana, lo primero que hizo Verónica fue salir a buscar a su pareja en moto por Capitán Bermúdez y Granadero Baigorria. Llegó hasta la casa de Freddy, quien le informó que, tras el show en Buenos Aires, lo había dejado en la puerta de su casa.
Ante la insistencia por el derrotero de la mujer, le dieron otra versión: que el grupo había ido a la medianoche del domingo a tocar a Carcarañá y que habían regresado a eso las 2 de la madrugada del lunes. Hubo una tercera: que Bolaño pasó por el boliche El Templo, de Baigorria.
En la tarde del domingo, una amiga le aconsejó a Verónica que haga la denuncia en la Comisaría 2ª de Capitán Bermúdez. Entonces se activó una búsqueda intensa que con el pasar de las horas dio paso a las peores presunciones. La aparición de Bolaño este sábado las desactivó. Queda saber por qué estuvo ausente y, sobre todo, por qué no avisó a sus allegados dónde estaba.
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